Por Gustavo Rodríguez
03 Octubre 2023
EN UNA SALA DIFERENTE. El juicio contra los policía por el doble crimen de Tafí del Valle se realiza en las instalaciones del Tribunal Oral Federal. La Gaceta / fotos de Analía Jaramillo
Ocurrió en enero de 2017, en Tafí del Valle, cuando el centro turístico más importante de la provincia comenzaba a recibir miles de visitantes. Después de más de seis años de espera, comenzó el juicio contra 14 efectivos policiales. Por falta de espacio en el fuero penal, el debate se desarrolla en las instalaciones del Tribunal Oral Federal. Otro dato: más de la mitad de los acusados no sólo siguen prestando servicios, sino que algunos consiguieron ascensos.
Según la investigación realizada por la fiscala Mónica García de Targa, el 15 de enero de 2017 cuatro efectivos policiales se presentaron en la cancha de San José y se dirigieron a integrantes de la familia de las víctimas para pedirle $ 5.000 (unos U$S 350) y evitar que le secuestraron el VW Vento de su propiedad porque no tenía la documentación en regla. Los dueños del auto se resistieron y hubo una pelea en la que los efectivos se llevaron la peor parte.
Luego de ese incidente, los parientes se retiraron al domicilio para buscar los papeles y demostrar que estaba todo en regla. Cuando iban en camino, volvieron a cruzarse con los efectivos y hubo otra pelea en la que varios civiles terminaron siendo brutalmente castigados por efectivos que habían acudido en apoyo de sus compañeros.
En medio de esa situación, se presentaron en el lugar Oscar Martín y su padre Oscar Orlando Moreno y, después de que el último arrojara el arma que le habían quitado a uno de los efectivos en la cancha durante la primera pelea, según la acusación de la fiscala, acudió al lugar el comisario Dardo Romano que hirió mortalmente a los Moreno. Los familiares de las víctimas, al reaccionar por lo que había sucedido, fueron esposados y golpeados en el piso por los efectivos. Fueron considerados como víctimas Javier Martín y Raúl Alberto Moreno, Adrián Moya y Adrián Roldán.
Los delitos de los que están acusados los 14 imputados son:
- Doble homicidio agravado y apremios ilegales: como autores Romano, Mauricio Alejandro Rivero y Pablo Maximiliano Luna y como partícipe secundario Carlos Alberto Moreno.
- Cohecho y apremios ilegales: en esta lista aparecen los que comenzaron con los incidentes al pedir el soborno son Rodrigo Ezequiel Ramos, José Luis Bellido, Juan Martín Olivera y Alfredo Paredes.
- Apremios ilegales: fueron acusados de este delito Marcelo René Albornoz, Sergio Daniel Mena, Julio César López, Julio Ricardo Décima, Edgardo Jesús Sánchez y Diego Raúl González.
La audiencia
El tribunal integrado por Rafael Macoritto, Dante Ibáñez (presidente) y Diego Lammoglia dirigieron la primera jornada del debate. En la primera audiencia, además de superar algunas incomodidades por estar en una sala que no es la habitual, hubo un clima de tensión por la declaración del ex comisario Romano.
COMPLICADO. El ex comisario Dardo Romano perjudicó a los otros acusados al afirmar que el operativo estuvo mal hecho.
“La teoría de la fiscalía es falsa. No estaba enterado de lo que sucedió esa tarde. Sólo acudí porque pidieron colaboración”, explicó el principal acusado. “Al no haber móviles, concurrí al lugar en mi vehículo. Llegué y estaba todo oscuro, no se veía a dos metros. Me identifiqué como policía para que se acabara todo. De pronto descubrió que me hicieron dos disparos, retrocedí un par de metros y disparé. Esto no tendría que haber pasado, fue una enorme confusión. Si hubiera acatado la orden que di, hoy no hablaríamos de fallecidos. Fue un hecho confuso, cualquiera era cualquiera. Reaccioné por instinto y realicé disparos al aire”, declaró.
Romano también se preocupó en aclarar que la mayoría de los policías que aparecen en la causa no estaban bajo sus órdenes, ya que formaban parte de refuerzos del Operativo Verano de ese año. “Era jefe de la comisaría de Tafí del Valle y ellos no estaban bajo mi mando. Sólo lo hacían para pedir algún tipo de colaboración o que le soluciones los problemas”, explicó el acusado que es defendido por José Luis Chaván.
“El procedimiento que hicieron los otros acusados no estuvo bien. No deberían haberse presentado a un lugar donde había más de 200 personas a exigir documentación de un vehículo. Hubieran hecho ese operativo en otro momento y lugar. Pero insisto, no estaban bajo mi control”, remarcó, lo que generó malestar entre Mario Alejandro Herrera, Flavia Silvana Soria, Jorge Muñoz, Julieta Jorrat, Benjamín Muñoz, Carlos Posse, Raquel Ferreira Asis y Cintia Britos, los defensores de los otros acusados.
La fiscala Marta Jerez y su auxiliar Osvaldo Martínez Terán y los querellantes Mónica López, Braulio Ramón Zelarayán (h) y Nicolás Bugeau se dedicaron a remarcar cada una de las contradicciones que habría cometido el único de los imputados que aceptó hablar en la audiencia. Una de ellas fue que él fue quien se encargó de proteger la escena del crimen hasta que llegó el jefe de la Unidad Regional Oeste a hacerse cargo de la situación.
Son 59 los policías que están siendo juzgados en tres debates orales diferentes
Con el del doble crimen de Tafí del Valle, son tres los juicios que se están realizando en simultáneo contra efectivos policiales. El más numeroso es el de la sedición policial que derivó en los saqueos de diciembre de 2013 que tiene a 43 personas sentadas en el banquillo de los acusados. Hoy se reanudarán las audiencias de este debate y está previsto que los testigos comiencen a identificar a los líderes de la protesta.
Los ex agentes Jesús Antonio Gerez y Juan Antonio Sánchez están siendo enjuiciados por el crimen de Víctor Paz, el acusado de un robo que estaba detenido en la seccional 13° y cuyo cuerpo fue encontrado el 24 de diciembre de 2013 en las márgenes del Canal Sur, con la esposas puestas. En un principio eran siete los efectivos que estuvieron procesados, pero sólo dos llegaron a debate oral.
Ayer comenzó el juicio del doble crimen de Tafí del Valle en un escenario diferente, la sala del Tribunal Oral Federal. Se recurrió a esas instalaciones porque no había sala disponible en el edificio del fuero penal para albergar a tantas personas.
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