De a poco, la pasión por el fútbol prende en la Patagonia

De a poco, la pasión por el fútbol prende en la Patagonia

La llegada de Brown y de Deportivo a la segunda categoría de la AFA fue crucial para despertar el interés en Puerto Madryn.

VISITANTES. Los jugadores del “santo” pasaron casi todo el día en el hotel. VISITANTES. Los jugadores del “santo” pasaron casi todo el día en el hotel.

Puerto Madryn vive una revolución futbolera, algo que parecía impensado hace 15 años. El ascenso de Guillermo Brown a la Primera B Nacional en 2011 fue el puntapié inicial, la semilla que comenzó a sembrar la pasión en la ciudad de las ballenas y de los lobos marinos.

Justo el año en el que la “banda” comenzó su recorrido por las principales categorías coincidió con el paso de River por la segunda división; por lo que el fervor futbolero dio un giro inesperado.

Matías tiene 31 años, es oriundo de San Rafael (Mendoza) y se desempeña como chofer en una empresa que realiza el servicio de transfers entre el aeropuerto de Trelew y Puerto Madryn. Hace 16 años vive en la ciudad costera. Es futbolero, hincha de Huracán de su ciudad (se define como simpatizante de Deportivo Madryn) y fue testigo de cómo las acciones del fútbol comenzaron a crecer en Madryn. “Acá es el deporte más popular. Sin embargo, el madrynense es tranquilo; no vas a encontrar un lugar en el que lo vivan como lo hacen en Tucumán”, advierte antes de dejar en claro que siente una sana envidia al ver los estadios tucumanos colmados.

En la temporada pasada y con la llegada del “aurinegro” también a la Primera Nacional, la ciudad comenzó a vibrar por dos de sus hijos dilectos. Desde entonces, todos los fines de semana al menos un partido de segunda división se juega en Madryn. Y en los bares o en las calles los hinchas de los dos representantes de la ciudad comparan las campañas y sueltan una que otra chicana. “Igualmente, acá todo termina en la cancha. Se va el partido y listo. A esperar al que viene. El ritmo de los hinchas es como el de los vecinos, muy pacífico y sin grandes emociones”, agrega Matías.

UN ACIERTO. Desarrollo AFA eligió a Puerto Madryn como sede para un torneo federal de fútbol playa. Atrajo muchísimo público, en un escenario privilegiado.  UN ACIERTO. Desarrollo AFA eligió a Puerto Madryn como sede para un torneo federal de fútbol playa. Atrajo muchísimo público, en un escenario privilegiado.

Más allá de Guillermo Brown y Deportivo Madryn, hay otros equipos que militan en la Liga del Valle y que aglutinan a los que jóvenes que se inician en el fútbol. A pocos metros del estadio “Raúl Conti”, en el que San Martín se presentará hoy, está ubicada la cancha del Club Social y Deportivo Juan José Moreno, que ostenta con orgullo el mote de “semillero naranja”. “Es un club formador de jugadores. Muchos de los madrynenses que llegan a jugar de manera profesional, salen de ahí”, explica Juan Luis Mendoza, encargado de un drugstore ubicado sobre la costanera.

“También está el Alianza Fontana Oeste, otra institución que abocada a la formación de futbolistas. No sé cómo no llegaron a las categorías superiores, porque siempre están nutriendo a Brown y al Deportivo”, agrega Matías.

En los últimos dos años, Puerto Madryn fue sede del torneo más federal de fútbol playa masculino que organiza Desarrollo AFA. En el sector ubicado a la altura de boulevard Guillermo Brown y Tehuelches, entre las bajadas 5 y 6, se armó la cancha playera en la que los fanáticos se agolparon para ver en acción a los representantes de la ciudad y algunos equipos de Buenos Aires como Racing y Tigre.

EL ESTADIO “RAÚL CONTI”. Es la casa de Guillermo Brown. Allí se presentará esta tarde San Martín. Ayer hubo acción en la cancha de Deportivo Madryn. EL ESTADIO “RAÚL CONTI”. Es la casa de Guillermo Brown. Allí se presentará esta tarde San Martín. Ayer hubo acción en la cancha de Deportivo Madryn.

El viento sopla durante todo el año en Puerto Madryn y el clima no ayuda para que la práctica del fútbol sea tan normal como en cualquier otro punto del mapa. Sin embargo, más allá de que durante el sábado se ven algunos “campitos” llenos de chicos corriendo detrás de la pelota, el fútbol de salón es una alternativa válida para el madrynense. “Por el clima se lo práctica mucho. Las categorías más chicas comienzan en fútbol de salón antes de pasar a las canchas de 11”, explica Mendoza.

Pese a que no se ve el fanatismo que hay en otras ciudades, en Puerto Madryn el fútbol va ganando un lugar central. Muchos sueñan con ver en la Liga Profesional el clásico entre Brown y Deportivo (que se jugó por primera vez en la segunda categoría el año pasado). Pero tiempo al tiempo. “Primero, que ambos se asienten en la categoría. Es bueno para la ciudad tener a los dos en la Primera Nacional”, sentencia Julio, empleado de un hotel de una ciudad en la que el fútbol hoy es parte importante de su vida diaria.

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