05 Diciembre 2019
RIESGO. Bolsonaro se quedaría sin sufragio en la Asamblea General. reuters
ORGANZACIÓN DE LAS NACIONES UNIDAS / BRASILIA.- Brasil enfrenta el riesgo de perder su derecho de voto en el seno de la Organización de las Naciones Unidas si no paga parte de los 400 millones de dólares que adeuda al organismo. Así lo manifestaron funcionarios de la ONU y así lo reconocieron diplomáticos brasileños.
De la deuda de 415,8 millones de dólares que tiene Brasil, 143 millones corresponden a 2019, confirmaron unos y otros.
De acuerdo con las reglas de la ONU, si un país tiene una deuda equivalente o superior a las contribuciones previstas para los dos próximos años, puede perder su voto en la Asamblea General, salvo que lograse demostrar que la incapacidad para pagar está fuera de su control.
“Hay un riesgo considerable de que Brasil, por primera vez en la historia, pierda su derecho a votar en la ONU el 1 de enero de 2020”, advirtió el secretario de relaciones internacionales del Ministerio de Economía, Erivaldo Gomes, en un memorando interno.
Brasil es el segundo mayor deudor de la ONU, después de los Estados Unidos. El gobierno de Jair Bolsonaro debe pagar al menos 126,6 millones de dólares antes de fin de año si quiere evitar perder su voto, ratificó Gomes en el informe interno, al que tuvo acceso la agencia Reuters.
El Ministerio de Economía no respondió de inmediato cuando fue consultado por la agencia de noticias acerca de si concretara el pago este año.
En la actualidad, los Estados de Comores, Santo Tomé y Príncipe, y Somalia están sujetos a esta regla, pero la Asamblea General de 193 miembros votó en octubre en favor de permitir que sigan votando.
La lista “roja”
La ONU dijo ese mes que la deuda total que los países mantienen con ella asciende a 1.385 millones de dólares, de los cuales 860 millones corresponden a los 2.850 millones de su presupuesto regular para 2019, que financia sus trabajos políticos, humanitarios, de desarme, económicos, de asuntos sociales y comunicaciones.
Funcionarios de la ONU indicaron entonces que siete países son responsables del 97% de la deuda total -Estados Unidos, Brasil, Argentina, México, Irán, Israel y Venezuela-, mientras que el resto se reparte entre 58 estados. (Reuters)
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