La educación física se hace un lugar propio dentro de la escuela

La educación física se hace un lugar propio dentro de la escuela

La actividad cuenta con una dirección propia en Educación. Propuesta para conocer y cuidar el cuerpo

14 Junio 2016
La educación física en las escuelas está dejando de ser un espacio de mero entrenamiento del cuerpo para convertirse en un espacio de aprendizaje donde también se ponen en juego procesos cognitivos y mentales. Así lo afirma la profesora Liliana Jenks, titular de la Dirección de Educación Física del Ministerio de Educación, un área que se creó durante esta gestión con le objetivo de darle más protagonismo a la actividad física desde el nivel de jardín de infantes hasta el de los adultos.

“Hay una mirada de cambio sobre la educación física, una mirada en la que siempre están presentes los otros, en la que se busca la empatía, el ponerse en el lugar al otro, y en la que los profesores nos ocupamos de pensar qué podemos hacer para facilitar la participación de los chicos. Y todo eso es aprendizaje para ellos”, destaca Jenks.

“La escuela ha cambiado y el proceso de formación docente tiene que acompañar estos cambios. Actualmente se sabe que conocer y registrar el propio cuerpo es importante para la construcción de la identidad. Una identidad que los chicos a veces pierden en la cuestión masiva que implica la escuela”, subraya.

Aprendizajes

“Mediante la práctica de los deportes los chicos no solo aprenden el deporte en sí; aprenden a expresarse, a manejar sus emociones, a respetar reglas, a llevar adelante un proceso de socialización”, añadió la funcionaria.

Enfatiza en que también aprenden que en la vida a veces se gana y a veces se pierde, y cómo enfrentar la frustración, aunque no se apunte a desarrollar en las escuelas el deporte ni como competencia ni como espectáculo. “De eso ya se encargan los empresarios”, apunta Jenks.

La funcionaria considera que el aprendizaje, incluso, va más allá. “La actividad motriz puede contribuir a resolver situaciones de la vida diaria. Por ejemplo, cuando los chicos hacen natación están aprendiendo a desenvolverse en un medio desconocido. La mente no está disociada del cuerpo. También pueden aprender a resolver problemas y a superar obstáculos”, agrega.

“Creo que muchas veces el tema del cuerpo queda subvalorado respecto de lo que tiene que ver con lo cognitivo, y ese enfoque es el que se ha ido modificando en los últimos años. Por eso, también, desde esta nueva dirección trabajamos en forma transversal con las demás direcciones de nivel”, finaliza Jenks.

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