Mensaje para los furtivos

A las corridas. Así fue el acto de destrucción de unos 1.500 metros de trasmallos que realizó ayer personal de la Dirección de Flora y Fauna de la provincia en la estación de Piscicultura de El Cadillal. Mientras ello ocurría, Carlos Riviere esperaba la llegada de ovas de La Angostura para iniciar el proceso de reproducción artificial de pejerrey y la licenciada Ana Palacios, volvía luego de rescatar una iguana de una empresa constructura. El ritmo de trabajo es intenso.

No hubo mucho show en el acto de destrucción. De unas 12 bolsas arpilleras se sacaron las redes que fueron secuestradas por personal de la Policía Lacustre y de la Dirección de Delitos Rurales y Ecológicos en operativos realizados en El Cadillal y en diferentes localidades de Santa Rosa de Leales. Luego, con machete, se destruyeron cada una de ellas.

“Este no es el primero que hacemos en el año y estamos convencidos de que no será el último”, se apura en aclarar Riviere a LG Deportiva.

El técnico, especialista en la reproducción de pejerreyes, pidió la colaboración de todos los pescadores deportivos de la provincia para acabar con los furtivos que tanto daño le están causando a la fauna ictícola de la provincia.

“Tenemos que trabajar de manera conjunta. De nada sirve que actuemos cuando el daño ya está hecho. Necesitamos frenarlos antes de que sacrifiquen los peces. El organismos está abierto a recibir todo tipo de propuesta y denuncias para que, después de ser investigadas, se actúe con todo el peso de la ley”, agregó Palacios.

Poco personal

Actualmente la Dirección de Flora y Fauna cuenta con dos guardapescas. Dos mujeres para cuidar La Angostura, El Cadillal, Escaba, todo el río Salí y sus afluentes, los ríos trucheros. “Mucha gente no entiende, pero hacemos un esfuerzo enorme para estar en todas partes”, comentó Riviere.

“Entendemos el malestar de los pescadores, pero ellos también tiene que entender que el personal, además de este tipo de operativos, tiene que atender los delitos que se cometen contra la fauna y la flora en toda la provincia”, destacó.

Los guardapescas comenzaron a desaparecer desde que se aprobó la Ley 6.292. La norma le dio facultad a la Policía a realizar los controles y a Flora y Fauna como autoridad de aplicación.

“Hace poco tiempo le dimos una charla al personal policial para que sepan como actuar si es que se le presenta un caso. Esperamos que los buenos resultados no tarden en aparecer”, concluyó la bióloga.