30 Agosto 2014
Alerta para la Argentina: Brasil entra en recesión
Los analistas atribuyen esta situación a las políticas que adoptó Rousseff para alentar la demanda interna y no a las inversiones La economía del gigante sudamericano acumuló dos trimestres consecutivos de retroceso, según las cifras oficiales que divulgó el gobierno
PROMOCIONES. En San Pablo, vendedores apelan a estrategias de marketing para reactivar la venta de automóviles. reuters
SAN PABLO, Brasil.- La economía de Brasil cayó en recesión en la primera mitad del año, después de un desplome de la inversión, y de que la organización del Mundial de fútbol sofocara la actividad económica. Así, la fase recesiva se presenta como un golpe a las ya menguantes esperanzas de la presidenta, Dilma Rousseff, de ser reelecta en los comicios previstos para octubre.
La mayor economía de Latinoamérica ha tenido un lento crecimiento por más de tres años bajo las políticas de Rousseff, que han disminuido la confianza de los consumidores y de las empresas. Al mismo tiempo, han provocado fuertes pérdidas para los inversores financieros.
La economía brasileña se deprimió aún más en el segundo trimestre, cuando registró una contracción del 0,6% respecto al primer trimestre, según datos oficiales del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE). Por otro lado, el organismo también revisó a la baja su estimación para la actividad económica del primer trimestre, a una contracción del 0,2%.
La noticia de la recesión, la primera de Brasil desde la crisis financiera global de 2008, ofrece un arma poderosa a los opositores de Rousseff para las elecciones del 5 de octubre, justo en el momento en el que la candidatura de la mandataria se encuentra más vulnerable.
Los sondeos de la última semana han mostrado que la mandataria sería derrotada por la candidata centrista, Marina Silva, en caso de que se produzca una segunda vuelta, situación que, por ahora, parece probable. Silva y el otro candidato de importancia, Aécio Neves, han criticado a la presidenta por su manejo de la inflación y por, supuestamente, de arruinar el impulso económico que durante la última década había convertido a Brasil en una de las favorita de Wall Street.
Lo que dejó el Mundial
La construcción civil y las manufacturas sufrieron, particularmente, durante el segundo trimestre, según los datos del IBGE. Brasil organizó el Mundial de fútbol en junio y julio, que provocó una desaceleración en muchas fábricas y minoristas, debido a que se declararon feriados públicos en los días de partidos, con el fin de prevenir problemas logísticos.
Sin embargo, economistas locales coincidieron en que los problemas de Brasil van más allá de cualquier evento reciente como el Mundial, ya que responsabilizan a las políticas del Gobierno que se han enfocado demasiado en estimular la demanda interna, y han dejado de lado la necesidad de atraer la inversión extranjera.
Los expertos dicen que los datos sobre recesión destacan que el próximo presidente deberá aplicar profundas reformas. “La recuperación a partir de aquí será lenta”, consideró Eduardo Velho, economista jefe de INVX Global, un fondo de inversión de San Pablo. “Necesitamos un programa económico basado en ajustes fiscales y flexibilidad monetaria, y mejoras en la productividad”, aseveró.
En la primera respuesta del gobierno, tras la divulgación de las cifras de crecimiento, el ministro de Hacienda, Guido Mantenga, manifestó que el escenario internacional no ayuda a la economía del gigante sudamericano. Además, el funcionario reiteró su expectativa de que se produzca un repunte de la actividad durante el tercer trimestre del año.
La inversión en Brasil se desplomó un 5,3% en el segundo trimestre, en comparación al período previo, su peor desempeño desde inicios de 2009. La industria también sufrió su cuarto declive consecutivo en la medición trimestre contra trimestre, al ceder un 1,5%.
La contracción del segundo trimestre en Brasil fue peor al retroceso de 0,4% que arrojaron los pronósticos de 47 analistas consultados por la agencia Reuters. La última recesión en el país vecino se produjo desde fines de 2008 hasta comienzos de 2009, durante la crisis financiera global. (Reuters)
Bajas expectativas
Brasil creció por debajo de los esperado
“El frente externo comienza a reflejar señales de alerta en Brasil”, afirma la economista Belén Olaiz, de la consultora Abeceb.com. El principal socio comercial de la Argentina comenzó el año con una expectativa de crecimiento del 4%. “Sin embargo, el consenso del mercado apunta a un crecimiento del 0,7%”, remarcó. Según la experta, para 2015 se espera una expansión del 1% interanual. “Detrás de este escenario hay varios factores: los bajos niveles de confianza, tanto de empresarios como de consumidores, asociados a las bajas expectativas en la gestión económica de la presidenta brasileña, Dilma Rousseff”, explica.
Impacto en el país
El gigante sudamericano es el principal socio
La industria brasileña afronta problemas de competitividad, vinculados a los elevados costos laborales, al déficit de infraestructura, y a debilidades cambiarias. ¿Cómo puede impactar la recesión de Brasil en la economía de la Argentina? Olaiz advierte que el gigante sudamericano es el principal destino de las industrias locales, en particular del sector automotriz. Cabe destacar que Tucumán también está involucrado en operaciones comerciales con Brasil, ya que el fabricante de camiones Scania, que tiene una planta en la provincia, comercializa productos a ese mercado sudamericano.
Las causas de la recesión
“Exportamos menos autos a la Argentina”
La caída de las exportaciones de automóviles de Brasil a la Argentina fue una de las razones señaladas por el ministro de Hacienda del país vecino, Guido Mantega, para explicar la caída de su economía. El retroceso fue del 0,6% en el segundo trimestre. “Exportamos menos autos a la Argentina y ésa es una de las causas por la que estamos creciendo menos”, indicó el funcionario, según consignó la agencia DyN. Las exportaciones brasileñas de automotores registró en los primeros siete meses de 2014 una caída del 35,4% respecto del mismo período del año pasado. La Argentina es uno de los principales destinos.
La mayor economía de Latinoamérica ha tenido un lento crecimiento por más de tres años bajo las políticas de Rousseff, que han disminuido la confianza de los consumidores y de las empresas. Al mismo tiempo, han provocado fuertes pérdidas para los inversores financieros.
La economía brasileña se deprimió aún más en el segundo trimestre, cuando registró una contracción del 0,6% respecto al primer trimestre, según datos oficiales del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE). Por otro lado, el organismo también revisó a la baja su estimación para la actividad económica del primer trimestre, a una contracción del 0,2%.
La noticia de la recesión, la primera de Brasil desde la crisis financiera global de 2008, ofrece un arma poderosa a los opositores de Rousseff para las elecciones del 5 de octubre, justo en el momento en el que la candidatura de la mandataria se encuentra más vulnerable.
Los sondeos de la última semana han mostrado que la mandataria sería derrotada por la candidata centrista, Marina Silva, en caso de que se produzca una segunda vuelta, situación que, por ahora, parece probable. Silva y el otro candidato de importancia, Aécio Neves, han criticado a la presidenta por su manejo de la inflación y por, supuestamente, de arruinar el impulso económico que durante la última década había convertido a Brasil en una de las favorita de Wall Street.
Lo que dejó el Mundial
La construcción civil y las manufacturas sufrieron, particularmente, durante el segundo trimestre, según los datos del IBGE. Brasil organizó el Mundial de fútbol en junio y julio, que provocó una desaceleración en muchas fábricas y minoristas, debido a que se declararon feriados públicos en los días de partidos, con el fin de prevenir problemas logísticos.
Sin embargo, economistas locales coincidieron en que los problemas de Brasil van más allá de cualquier evento reciente como el Mundial, ya que responsabilizan a las políticas del Gobierno que se han enfocado demasiado en estimular la demanda interna, y han dejado de lado la necesidad de atraer la inversión extranjera.
Los expertos dicen que los datos sobre recesión destacan que el próximo presidente deberá aplicar profundas reformas. “La recuperación a partir de aquí será lenta”, consideró Eduardo Velho, economista jefe de INVX Global, un fondo de inversión de San Pablo. “Necesitamos un programa económico basado en ajustes fiscales y flexibilidad monetaria, y mejoras en la productividad”, aseveró.
En la primera respuesta del gobierno, tras la divulgación de las cifras de crecimiento, el ministro de Hacienda, Guido Mantenga, manifestó que el escenario internacional no ayuda a la economía del gigante sudamericano. Además, el funcionario reiteró su expectativa de que se produzca un repunte de la actividad durante el tercer trimestre del año.
La inversión en Brasil se desplomó un 5,3% en el segundo trimestre, en comparación al período previo, su peor desempeño desde inicios de 2009. La industria también sufrió su cuarto declive consecutivo en la medición trimestre contra trimestre, al ceder un 1,5%.
La contracción del segundo trimestre en Brasil fue peor al retroceso de 0,4% que arrojaron los pronósticos de 47 analistas consultados por la agencia Reuters. La última recesión en el país vecino se produjo desde fines de 2008 hasta comienzos de 2009, durante la crisis financiera global. (Reuters)
Bajas expectativas
Brasil creció por debajo de los esperado
“El frente externo comienza a reflejar señales de alerta en Brasil”, afirma la economista Belén Olaiz, de la consultora Abeceb.com. El principal socio comercial de la Argentina comenzó el año con una expectativa de crecimiento del 4%. “Sin embargo, el consenso del mercado apunta a un crecimiento del 0,7%”, remarcó. Según la experta, para 2015 se espera una expansión del 1% interanual. “Detrás de este escenario hay varios factores: los bajos niveles de confianza, tanto de empresarios como de consumidores, asociados a las bajas expectativas en la gestión económica de la presidenta brasileña, Dilma Rousseff”, explica.
Impacto en el país
El gigante sudamericano es el principal socio
La industria brasileña afronta problemas de competitividad, vinculados a los elevados costos laborales, al déficit de infraestructura, y a debilidades cambiarias. ¿Cómo puede impactar la recesión de Brasil en la economía de la Argentina? Olaiz advierte que el gigante sudamericano es el principal destino de las industrias locales, en particular del sector automotriz. Cabe destacar que Tucumán también está involucrado en operaciones comerciales con Brasil, ya que el fabricante de camiones Scania, que tiene una planta en la provincia, comercializa productos a ese mercado sudamericano.
Las causas de la recesión
“Exportamos menos autos a la Argentina”
La caída de las exportaciones de automóviles de Brasil a la Argentina fue una de las razones señaladas por el ministro de Hacienda del país vecino, Guido Mantega, para explicar la caída de su economía. El retroceso fue del 0,6% en el segundo trimestre. “Exportamos menos autos a la Argentina y ésa es una de las causas por la que estamos creciendo menos”, indicó el funcionario, según consignó la agencia DyN. Las exportaciones brasileñas de automotores registró en los primeros siete meses de 2014 una caída del 35,4% respecto del mismo período del año pasado. La Argentina es uno de los principales destinos.
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