Construirán centros terapéuticos y preventivos de adicciones en Salta

Construirán centros terapéuticos y preventivos de adicciones en Salta

Las instalaciones estarán en Orán y en San Lorenzo. Colaborarán los gobiernos provincial y municipal con la Sedronar.

22 Julio 2014
SALTA.- Dos centros preventivos para adictos serán construidos en las ciudades de Orán y San Lorenzo, al mismo tiempo que dos casas educativas terapéuticas (CET) de la capital salteña recibirán una inversión de 21,5 millones de pesos, en un trabajo conjunto del gobierno provincial y municipal con la Sedronar.

La ministra de Derechos Humanos, Marianela Cansino, se reunió con el titular de la Sedronar, Juan Carlos Molina, para acordar la instalación de dos centros preventivos locales de adicciones (Ceplas) en Orán y San Lorenzo, informó el gobierno salteño.

Los funcionarios anunciaron además la creación de una mesa de coordinación para trabajar con comunidades originarias sobre el consumo problemático de sustancias. El Ministerio coordinará con las ONG que trabajan en esa problemática la asistencia de la Sedronar.

Cansino explicó que los Ceplas generan un ambiente que acompaña a adolescentes y jóvenes en situación de vulnerabilidad social y de riesgo frente al consumo problemático de alcohol y de sustancias psicoactivas, acompañándolos en la construcción de un proyecto de vida saludable.

Esos centros ofrecen un espacio de contención con actividades recreativas, formativas y de concientización que impulsan la creatividad y el desarrollo cultural, deportivo y artístico.

A esa tarea aporta la comunidad local a través de sus estamentos gubernamentales, entidades de la sociedad civil, organizaciones políticas e instituciones religiosas.

Por otra parte, el intendente de Salta, Miguel Isa, firmó hoy con Molina un convenio por el que la Nación invertirá 21,5 millones de pesos para construir dos CET en la ciudad.

"Desde nuestro compromiso con la sociedad tratamos de dar todo para ayudar a los jóvenes con problemas de adicciones. La idea es recuperar el tejido social que se rompe cuando las drogas entran en la familia", dijo Isa.

El sacerdote Molina define a los CET como sitios donde, además de recibir atención terapéutica, los chicos encuentran que pueden continuar sus estudios, capacitarse en oficios y hacer deportes. Los CET, como espacios de inclusión, deben tener también un fuerte lazo cultural con la región en la que se instalan, remarca Molina. (Télam)

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