Mientras estudian, ayudan a los demás

"¿Te animás a hacer algo por tu compañera ciega?", lo desafió el formoseño Marcelo González. "Claro que sí", le contestó al toque Christian Zelaya Garzón, estudiante de Derecho de la UNT. Una rápida colecta en la facultad de Abogacía bastó para que Teresa Arroyo tuviera en sus manos el MP3 que tanto necesitaba para grabar las clases y escucharlas cuando llegara a su casa. Pero ese pequeño gesto solidario no quedó allí, sino que fue la semilla para que naciera una fuerte amistad y con ella la idea de diseñar el proyecto "Audiolibros", que presentaron en el Voluntariado Universitario para hacer más fácil la vida de muchos alumnos del secundario.

Los hermanos Christian, de 25 años, y Gabriel Zelaya Garzón, de 24 años, estudiante de Ciencias Económicas; Luis Albornoz, de 27, alumno de Abogacía y Lourdes Peralta, de 20, de Recursos Humanos de la Unsta, son los voluntarios más constantes del proyecto que comenzó a mediados del año pasado. "Ya veníamos trabajando con audio libros para ayudar a Teresa, cuando en 2009 surgió una convocatoria específica para escuelas secundarias a través de la UNT. Así nos abocamos a colaborar con los chicos de la nocturna del Colegio Nacional, donde había cinco personas no videntes", contaron los jóvenes.

Con la mitad de los fondos del programa, que serán de $ 22.000 (el total no llegó todavía) compraron cinco netbooks, materiales de insumos para computadora, pendrive, auriculares y MP3. Lograron construir un programa especial para ciegos y grabaron nueve libros de textos para cinco materias del secundario: Psicología, Ciencias Sociales, Historia, Biología y Literatura.

Lo interesante del programa ideado por los voluntarios universitarios es que no hace falta tener una computadora para bajar los audiolibros sino que pueden ser descargados en un MP3 o en el celular. Además no sólo podrá ser escuchados por los chicos del Colegio Nacional, sino por todos los que lo necesiten,

Esfuerzo mancomunado

El Voluntariado Universitario se desarrolla desde 2006 con el esfuerzo de la Secretaría de Políticas Universitarias y el Ministerio de Educación de la Nación. Miriam Farías, directora del programa desde la UNT, destacó el entusiasmo de estudiantes y docentes por participar.

En la larga lista de proyectos que aún continúan vigentes desde 2009, está el de "Prácticas no violentas en ámbitos educativos y su proyección sociocomunitaria". Se trata de una iniciativa coordinada por la profesora de Teatro y alumna de la Facultad de Filosofía y Letras Marcela Martínez, que se lleva a cabo en la escuela Isauro Arancibia.El grupo está compuesto por Georgina Alvarez, Carlos Bulacio, Nicolás Jalil y Luciana Cruz, entre otros voluntarios, todos alumnos de las facultades de Psicología y Filosofía y Letras de la UNT e integrantes la Agrupación Estudiantes Humanistas.

"Utilizamos distintas herramientas como talleres, murales, dibujos y representaciones teatrales que realizan los propios chicos", cuenta Georgina. "Nuestros referentes son Gandhi, Martín Luther King y Silo (Mario Rodríguez Cobos). Tratamos de inculcarles a los alumnos los principios de la no violencia, la no discriminación y la inclusión y de crear ámbitos de expresión que ellos mismos puedan replicar primero en su comunidad escolar y después en sus propios barrios", explicó. Como parte de las actividades, los jóvenes participan de los festejos por el Día de la No Violencia, que se lleva a cabo el 2 de octubre. Ese día, todos los chicos se suman a una marcha contra la no violencia hacia la plaza Independencia.

El proyecto se extendió por la escuela Presidente Perón y este año sumará a la escuela media de El Manantial. El objetivo es enseñarles a los chicos a vivir y relacionarse desde la paz.