El delegado de la Unión Ferroviaria, Jorge Murillo, reclamó celeridad a la Nación y reconoció que los 56 operarios de los talleres ni siquiera pudieron ingresar aún a la reparada nave de vagones. "Desde Buenos Aires nos dicen que nadie sabe quién administrará los talleres. Se dijo con bombos y platillos que iban a ingresar 150 jóvenes, pero hasta aquí no pasó nada", se quejó. "Si no hay material rodante, esto no tiene razón de ser. Nosotros ya planteamos que nos dejen entrar a la nave de vagones, pero aún no podemos hacerlo. Dicen que hay una deuda de la Nación con la empresa (Metalúrgica Di Bacco) que hizo las refacciones. Sería interesante que podamos ingresar para probar las herramientas que se arreglaron. Incluso, hay trabajos en vagones que se podrían ir haciendo. Pedimos que ingresen los 150 operarios prometidos y que se reabra esa nave", insistió el dirigente sindical.