“Hay que volver al diálogo y a la atención humanizada”

“Hay que volver al diálogo y a la atención humanizada”

Un experto en Bioética dice que el paciente de hoy es objeto de estudio y tratamiento. Carlos Gherardi, docente de la UBA, propone volver a la idea hipocrática. "No existen enfermedades, sino personas enfermas".

ASISTENCIA. No sólo debe controlar que los valores sean los normales. ASISTENCIA. No sólo debe controlar que los valores sean los normales.
03 Diciembre 2008

Salvo excepciones, la vieja relación médico-paciente (con el profesional de cabecera o de familia, el que conocía al paciente desde pequeño) fue cambiando a través del tiempo. Actualmente prevalece la relación de tipo despersonalizada y hasta ambigua: la del paciente con el sistema de salud. Esta reflexión pertenece a Carlos Gherardi, docente de Medicina Interna de la UBA, director del Comité de Etica del Hospital de Clínicas y del Programa de Bioética, quien propone la necesidad de hacer un replanteo de esta relación, al celebrarse hoy el Día del Médico.
Tras admitir que las ventajas que brinda la mayor disponibilidad de recursos técnicos están fuera de toda discusión, el médico advirtió que los costos de la mayor tecnificación son altos y vienen siendo materia de estudio de la bioética.

No solo parámetros
Aun cuando se disponga de la última tecnología, cuando la vida y la salud se reducen sólo a un conjunto de parámetros y signos vitales medidos y registrados por aparatos, rayos X, resonancia magnética y análisis, la labor de los médicos pareciera que se reduce a corregir los valores que están “fuera de lo normal”.
Dentro del actual sistema de salud la persona consulta a varios especialistas, uno por cada problema que tiene. Aquí surge la pregunta de rigor: ¿cuál es el problema que lo llevó a la primera consulta?

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Rescatar el diálogo
Al igual que la historia, la medicina no vuelve atrás. Sin embargo, hoy urge rescatar valores, como por ejemplo la antigua idea hipocrática de que “no existen enfermedades, sino personas enfermas”. También es necesario redefinir la relación entre el médico y el paciente, volver al diálogo y a la atención humanizada.
“La pregunta es saber si la medicina va para adelante. Una cosa es la ciencia médica y otra cosa es la medicina empírica -es decir, la práctica de la medicina-, que es un arte que toma a la medicina como soporte. Entonces, hay mucho progreso en el conocimiento científico, pero ese progreso aplicado a las enfermedades del hombre… es muy cuestionable si realmente es un progreso o no”, expresó. “El objetivo de la medicina -acotó- no es evitar la muerte, sino agotar todos los recursos para promover el bienestar integral del paciente mientras se pueda. Y, cuando el paciente es terminal, hay que contenerlo y evitarle el dolor y el sufrimiento”, dijo.
Para Gherardi, el progreso tecnológico va en contra de estos postulados: “El médico se ha transformado hoy en un eslabón de este sistema, en un operador técnico, y el paciente se ha transformado más en un objeto de estudio y de tratamiento”.

El paciente tiene voz
¿Hay que volver, entonces, a reeditar esa vieja relación entre médico y paciente, en la cual el médico es lo único que sabe y decide?. “No, ya no es igual - afirma Gherardi-. Ahora el paciente tiene el derecho y la obligación de participar en las decisiones médicas. Pero esto no significa que podamos entregarle un menú de posibilidades y decirle: ’bueno, ahora elija usted’, porque de este modo la medicina se estaría desvirtuando al perder compromiso. La obligación del médico es estar al lado del paciente para acordar y compartir el tratamiento que finalmente se elija, y para que se realice y tenga buen resultado”.
Gherardi es también especialista en terapia intensiva, una rama de la actividad médica donde a diario se toman decisiones entre la vida y la muerte.

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Ciencia y arte
“La ciencia de la incertidumbre, el arte de la probabilidad”. Esta frase del canadiense William Osler (1849-1919) tiene más de 120 años y es como una definición de la medicina. El médico utiliza el caudal de conocimientos que le dio la ciencia empírica, pero los aplica usando los elementos que le provee el sistema de salud.
Las novedades médicas se publican en diversos journals y son los que marcan el rumbo global de los avances. Cada uno de los artículos publicados fue sometido a criterios de revisión, tarea que está a cargo de un comité de expertos independientes. Este comité evalúa previamente el trabajo de sus colegas para que la información sea publicada.

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