Una tarde llena de emociones, niños jugando al aire libre, un café sobre la mesa y puro nerviosismo, es el resumen de lo que se vivió en la cantina de Tucumán Rugby. Allí se apostó a la cábala: mantenerse parados para que Las Leonas dieran vuelta el resultado. Sucedió que, cuando se levantaron, Argentina descontó con el gol de Agustina Gorzelany. “Vamos, vamos”, “quedan 15 minutos” decía la mini hinchada de “Vicky”, que no paró un segundo. La iniciativa tuvo respuesta a pesar del día y el horario. “La idea era que ella sintiera el aliento, desde su club. Es complicado un domingo a la tarde y en vacaciones. La mayoría estaba de viaje, pero queríamos que sintiera el apoyo. Estuvimos todo el tiempo”, aseguró una de las organizadoras de la convocatoria.