En sentido estricto, lo que jugará Boca esta noche no es una final, pero es como si lo fuera: de ganar o perder (en tiempo reglamentario o en tanda de penales) depende su supervivencia en esta edición de la Copa Libertadores, torneo que lleva 15 años sin ganar y que se ha convertido en su gran obsesión. Para Boca, está la Copa y después el resto. Por eso, el técnico Sebastián Battaglia apostó por una formación alternativa frente a Banfield y le dio descanso a sus figuras principales. Aunque lo pagó con un sorprendente 0-3 de local, lo importante para el DT es tener a su 11 estelar con las piernas frescas para una revancha de octavos que se jugará con la intensidad de una final. Porque Corinthians y su prestigio internacional tampoco pueden permitirse una eliminación tan prematura.

Boca, cueste lo que cueste

En cuestión de nombres, el “Xeneize” parte con cierta ventaja para la revancha: sin sancionados ni lesionados, saldrá con lo mejor que tiene en su plantel. Que es básicamente el mismo equipo que jugó en Brasil, pero con el regreso de Frank Fabra en lugar de Agustín Sández. Corinthians, en cambio, llega bastante tocado. De hecho, hasta anoche el entrenador Vitor Pereira no había confirmado el equipo, pero tendrá que hacer algunas variantes obligadas. La primera es la de Adson, delantero titular en la ida, quien dio positivo de covid y no se subió al avión. A esa baja se suma la de Gustavo Mosquito y probablemente la de Willian, quien sufrió una lesión en el hombro en el primer duelo. También arrastran lesiones Maycon, Rafael Ramos, Fagner y Renato Augusto, entre otros.

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Por haber compartido el grupo E en la etapa clasificatoria, este será el cuarto enfrentamiento entre ambos en el torneo, una situación muy poco habitual, máxime considerando que se volvieron a cruzar en la primera llave eliminatoria. Por ser recientes, esos tres duelos sirven a modo de pantallazo para lo que se puede esperar del choque de esta noche en La Bombonera, a partir de las 21.30. En el de la semana pasada, terminaron igualados 0-0 tras haber tenido ambos oportunidades concretas de convertir, y si bien Agustín Rossi contuvo un penal (rubro que le da un plus a Boca en caso de definición desde los 12 pasos), la figura terminó siendo el arquero brasileño Cassio Ramos. Boca terminó mejor y no hubiera sido injusto que se llevara una ventaja mínima.

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En los dos choques anteriores, correspondientes a la fase de grupos, Corinthians ganó 2-0 el primero, disputado en Brasil, pero Boca fue muy superior y pudo golear en la revancha disputada en la Bombonera, pese a haber igualado 1-1.

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