Apenas han dado las 9 y las velas ya han sido encendidas. Las puertas se encuentran abiertas y un grupo de personas, algunas con una pronunciación cantarina, rezan el avemaría. La escena transcurre en la capilla María del Rosario de San Nicolás, de la ciudad de Yerba Buena. ¿Qué hacen orando sin parar? ¿Cómo logran entregarse a tamaña tarea? La respuesta la conocen bien los habitantes de la zona. Esta mañana, como cada 25 de mes, aquí hay plegarias constantes en honor a la santa patrona del templo.

Los ruegos se remontan a un cuarto de siglo atrás. Los memoriosos todavía recuerdan la historia sucedida en 1988, cuando un vecino enfermo del corazón le prometió a la Virgen del Rosario que, si intercedía por él, le haría una gruta. El hombre se curó. Y cumplió su juramento. Con el tiempo, esa cruz clavada en un montículo de piedra se transformó en un templo, en el que hoy caben 300 fieles. Pero, ¿cómo se le reza a la Virgen del Rosario? ¿Qué se le pide? "Como ella nos dice, el santo rosario es el arma a la cual le teme el enemigo. Es también el refugio de quiénes buscan alivio a sus pesares. Y es además la puerta para entrar al corazón de nuestra Señora", dice el padre Guillermo Benzi, vicario de la capilla.

"El rezo del rosario nos transmite paz. Cuando rezamos, sentimos sosiego en nuestro corazón", añade. Y enseguida aclara que debemos rezar con alegría y con entusiasmo, no con tristeza o como si fuese una carga. "Cuando le ofrecemos a María todas nuestras necesidades, ella nos carga en sus brazos y nos comprende", prosigue el sacerdote.

Cerca de allí, otra puerta se abre de a ratos, con insistencia. En cada oportunidad, el sol entra y hace resplandecer las cabelleras de los presentes. El Oratorio Sagrado Corazón Eucarístico de Jesús permanece abierto todo el día, en la esquina de las calles Aconquija y Andrés Villá. Lo hace gracias a los adoradores que, durante una hora cada uno, se sumergen en las plegarias. Y para que no se les olvide la obligación contraída, de cada banco cuelga un cartel que dice: "cumpla con su horario de adoración. Su compromiso es con Jesús, quien lo espera para derramar abundantes lágrimas".

A juzgar por la gente que va y viene, el rito se cumple. El sitio es conocido porque en más de una oportunidad sucedieron hechos con tinte milagroso, como cuando en 2010, un viernes de junio, aparecieron manchas de sangre sobre una imagen de la Última cena. Los vecinos Jorge Iramain, Mercedes Macome y Luciana Müller fueron testigos de aquel episodio. "Siento que en este lugar se expresa la mayor misericordia de Dios. Con el amor que nos tiene a toda la humanidad, él queda cautivo en una forma tan precaria y pequeña, como es el pan de la eucaristía. Ahí queda atrapado su amor para que nosotros podamos contemplarlo", reflexiona la doctora Müller, una década después de aquel acontecimiento.

"Entrar al oratorio es entrar al cielo con Dios, pero sin haber hecho ningún mérito. Por eso, una buena práctica al ingresar allí es acallarse uno mismo para escucharlo en ese silencio. Debemos aprender a dejar que Dios nos hable. Él es la gran misericordia", añade.

La Capilla San Antonio de Padua -situada en el barrio Marti Coll y construida en 1981- y la Capilla Nuestra Señora de la Caridad -que data de 1977- completan las paradas iniciales de este sector del circuito religioso.

La travesía continúa en la Iglesia Nuestra Señora del Valle, localizada en la plaza de Marcos Paz. Su edificación demandó unos 35 años, puesto que en 1916 se colocó la piedra basal del templo y recién en 1951 acabó la construcción. En 1984, la Virgen del Valle fue declarada patrona de los yerbabuenenses, y desde 1990 funcionan 13 centros pastorales permanentes, como la Casa de Ejercicios Espirituales Belén, el Hogar San Agustín o la Capilla San Cristóbal.

A unas cuadras de ahí, se yergue la capilla Nuestra Señora del Carmen, frente a la Plaza Vieja. Es la primera iglesia de Yerba Buena. Según los documentos, fue levantada alrededor de 1840, durante las guerras civiles entre los unitarios y los federales. Se la construyó de acuerdo al estilo español, y esa arquitectura casi no varió hasta nuestros días, salvo por una ampliación en un costado. En este punto termina la travesía de velas encendidas.

Itinerario, punto a punto:

El Cristo

Rotonda de Yerba Buena

Es obra de Santiago Chiérico. Las costillas de la escultura fueron realizadas de tal modo que resaltaran al ser iluminadas por el sol del este.

Oratorio

Avenida Aconquija altura 400

La capilla de adoración perpetua fue abierta en 2004. Desde entonces, los fieles se encargan de que siempre haya una vela encendida.

Iglesia de San Nicolás

Salas y Valdez y Chile

En 1988, un vecino enfermo del corazón le pidió a la Virgen del Rosario que intercediera por él. Se curó y levantó una gruta en su honor.

La Virgencita

Avenida Aconquija al 800

La imagen de María Auxiliadora proviene de la ciudad de Turín, en Italia. Fue bendecida el 23 de mayo de 1979.

Iglesia de la Caridad

Perú y Panamá

En junio de 1977 se celebró la primera misa en el lugar que hoy ocupa la parroquia, sobre un piso de cemento y con una mesa como altar.

Iglesia del Valle

Plaza de Marcos Paz

Empezó a construirse en 1916, pero las obras se extendieron hasta 1951. En 1984, la Virgen del Valle fue declarada patrona de Yerba Buena.

Iglesia de San Antonio

Barrio Marti Coll

En 1981, la señora Hill Terán de Medici donó el templo.

Iglesia del Carmen

La Rinconada

Es la primera iglesia de Yerba Buena. Fue construida en 1840 durante las guerras entre unitarios y federales.