La polémica es uno de los grandes aliados de Javier Milei. En esta oportunidad, el diputado manifestó que, si fuera presidente, prescindiría del Ministerio de Educación de Nación y calificó a las universidades públicas como “centros de adoctrinamiento”, proponiendo reformas para el sistema actual.

El diputado de La Libertad Avanza anhela ocupar el sillón de la Casa Rosada en 2023, y ya empezó a hablar sobre las medidas que realizaría si se concretará dicha situación. Asimismo, sostiene que ya tiene un “gabinete en las sombras” de cara a las presidenciales del año siguiente. Sin embargo, en esta ocasión el eje de la entrevista fue hacia la educación, hablando del Ministerio de Educación y las Universidades Públicas.

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"¿Ministro de Educación tenés también?", fue la pregunta del periodista Lucas Morando en Casi Patriotas por LN+. La respuesta del libertario fue contundente: “¿Vos tendrías un ministerio que no tiene escuelas?", acentuándose en que “la educación depende de las provincias” y no del órgano nacional.

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“Desarmarias el Ministerio de Educación”, respondió Morando. "Le daría otro formato, si no tiene escuelas, dependen de las provincias", reiteró el diputado. Luego, continuó con su crítica hacia las universidades públicas a las que tildó como “centros de adoctrinamiento”.

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Ante esta situación, Soledad Acuña, Ministra de Educación de CABA, salió al cruce con Milei.”Estoy en desacuerdo con este planteo que renuncia a obligaciones mínimas e indelegables del Estado. Podemos coincidir en la necesidad de reformar el Ministerio y hacerlo mas eficiente, pero nunca en desmantelarlo o renunciar a la educación como motor de desarrollo de un país", argumentó.

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"Las pruebas de qué sucedería sin ministerio de Educación, o con un ministerio débil, están a la vista: en Chubut, las clases atraviesan un conflicto que lleva cinco años. En Santa Cruz y en Chaco, la situación se vuelve insostenible", ejemplificó la ministra.

"Por eso, mucho cuidado con dejarse llevar por opiniones livianas, hechas desde la comodidad de la falta de responsabilidades concretas. Un país que no mira estratégicamente a la educación como herramienta de progreso no tiene destino", concluyó.