El arquero de San Martín fue protagonista de las fatídicas escenas que se registraron en el parque Avellaneda. El deportista había asistido al lugar para almorzar junto a su familia y en diálogo con LA GACETA aseguró que le tocó vivenciar “una película de terror”. 

“Mi nene estaba en el tobogán cuando de pronto sentimos un ruido muy fuerte, como una explosión. De inmediato y en shock salí a buscarlos y ahí lo vi a mi cuñado con los chicos. Todavía no sé cómo hizo, pero los salvó”, relató. 

El referente del plantel “Santo” contó también que a raíz de lo sucedido su hijo sufrió golpes y tuvo que recibir curaciones menores.

“Por suerte estamos bien, asustados, pero juntos. Sentí que en un segundo se me iba la vida cuando vi las ramas sobre los juegos y con el correr de las horas siento bronca porque creo que se podría haber evitado todo”, dijo Arce y agregó: “Es una falta de consideración que ese lugar no haya estado cuidado.” 

El arquero también manifestó su preocupación por la salud de la menor que permanece internada. “Yo la vi a ella y pude rescatarla. Tengo su imagen grabada y pido a Dios que la salve”, dijo.