Los dos goles que convirtió en la victoria sobre Nueva Chicago le permitieron a Marcelo Estigarribia escalar posiciones en la tabla de artilleros de la Primera Nacional, afianzarse como el goleador “santo” en la actual temporada con ocho conquistas y dejar en claro que es una especie de amuleto para el equipo que dirige Pablo De Muner.

Los ocho tantos que lleva en el torneo, Estigarribia los consiguió en seis partidos; y cada vez que firmó un tanto, San Martín sumó de a tres.

Si bien comenzó el campeonato algo peleado con el arco rival, pese a mostrar buen juego para el equipo, de a poco fue acomodando los tantos. En la fecha 6 pegó su primer grito para asegurar el triunfo contra Nueva Chicago en Matadores. Luego marcó un doblete contra Estudiantes de Río Cuarto, también aportó alegrías en los festejos sobre Temperley, Deportivo Maipú, Atlanta y otros dos gritos el pasado domingo contra el “Torito” de Mataderos.

Incluso, en esta oportunidad tuvo la oportunidad de festejar un hat-trick, pero Alan Minaglia le ahogó el grito. “Pese a los dos goles, me quedé con mucha bronca por ese gol que erré. Era el tercero de mi cuenta e iba a ser un golazo por la jugada que había armado el equipo. Lamentablemente no pude coronarla”, le explica “Chelo” a LG Deportiva, dejando de lado los flashes que lo apuntaron en la última victoria y pidiendo por el reconocimiento grupal. “Obvio que me pone contento haber convertido dos goles, pero mucho más porque el equipo volvió a ganar y estamos ahí, peleando, el torneo. Eso es lo que queremos todos y poder llevarlo a cabo te da una alegría inmensa”, agrega.

Luego de un triunfo clave que deja al “Santo” en una posición expectante y que entrega mucho ánimo para ir a buscar la cima en Isidro Casanova, en La Ciudadela hubo mucha autocrítica por el nivel del equipo en la última presentación. “Somos conscientes que hay cosas que no pueden volver a pasarnos si pretendemos llegar al final del camino peleando el campeonato. En el primer tiempo fallamos, pero nos dimos cuenta, corregimos los errores en el entretiempo y logramos asegurar la victoria”, dice feliz porque con alegría es más sencillo superar escollos. “Siempre es mejor corregir los defectos cuando venís de una victoria. Estamos en eso, con ganas de seguir evolucionando como equipo. Lo importante es que seguimos cerca del líder; ahora intentaremos ir a derrotarlos”, sentencia.

El juego contra Almirante, en el estadio “Fragata Sarmiento” es una especie de final anticipada. El “Mirasol” le lleva dos puntos al “Santo” y pese a que luego del juego del sábado todavía quedará mucho camino por recorrer, en Bolívar y Pellegrini entienden que es la oportunidad de sacar pecho y de bajarle copete a uno de sus oponentes de cara al sprint final.

“Es una final, un partido muy importante para nosotros. Siento que puede llegar a marcar en donde estamos parados. Ojalá que podamos volver con los tres puntos; lo positivo es que el grupo está bien, con ganas de sumar otra alegría”, remata Estigarribia.

En Isidro Casanova, un lugar en el que San Martín supo hacer historia, ahora va por el paso que confirme que tiene intenciones de luchar por el primer boleto. Para lograrlo necesita achicar al máximo el margen de error defensivo y mantener la contundencia de los últimos tres partidos. Claro, también de los goles de “Tanque”, ese que cada vez que marca le entrega en bandeja los tres puntos a su equipo.

Definiciones

Durante la práctica de hoy por la mañana, en el complejo “Natalio Mirkin”, Pablo De Muner comenzará a dejar todo listo para el duelo del sábado. Rodrigo Herrera pica en punta para reemplazar al suspendido Matías Ballini.

Buena recompensa

La próxima semana, San Martín tendrá fecha libre por lo que los jugadores tendrían entre tres y cuatro días de descanso tras volver de Buenos Aires. Eso sí, antes, deben sumar de a tres en Isidro Casanova.