Dos de los presuntos integrantes de la banda de delincuentes que asesinó de un disparo al agricultor José Porcel, en La Ramada de Abajo, podrían ser sindicados como homicidas seriales en su imputación, según un informe del Ministerio Público Fiscal (PPF) de la Justicia provincial.

La Fiscalía Especializada en Homicidios, a cargo de Adriana Giannoni, avanzó con un estudio de comparación de ADN entre muestras tomadas a los sospechosos y los rastros genéticos detectados en hechos similares en La Marta y Tala Pozo, donde se llevaron a cabo atracos con un modus operandi idéntico al del caso Porcel.

El prosecretario Marcelo Sallas coordinó las tareas, y contó con la colaboración con el Departamento de Inteligencia Criminal del Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (ECIF) del Ministerio Público Fiscal.

El estudio confirmó coincidencias entre los pruebas de ADN obtenidas en estos casos, indicó el MPF en un reporte oficial.

Contando con esa información, desde la Fiscalía interviniente remarcaron que dos de los imputados por estos hechos encuadrarían de esta manera en la calificación legal de homicidas seriales, al tratarse de tres casos. En tanto, otros de los acusados registraron dos homicidios. 

La pesquisa se basó en el análisis de la modalidad con la que operaba esta banda criminal, tanto en la forma en la que actuaban como en las zonas donde lo hacían y en la cantidad de sus integrantes. Esos datos posteriormente se confirmaron a partir de la realización de las pruebas genéticas llevadas adelante por el Cuerpo Médico Forense (CMF) del Ministerio Fiscal y que fueron confirmadas con los ADN de los imputados.

El 26 de junio, el productor José “Pepe” Porcel fue asesinado durante un robo. La Policía detuvo a dos sospechosos que habían sufrido un accidente durante la huída, luego del crimen. Los agentes de la división Homicidios, al mando de los comisarios Jorge Dib, Diego Bernachi y Juana Estequiño, fueron atando cabos y lograron la detención de otras siete personas acusadas de participar en el homicidio. Por su parte, Giannoni encontró similitudes en ese hecho con los crímenes de Antonio Gómez, ocurrido el 15 de noviembre en La Marta, y de Fiorentino Gómez, registrado el 2 de enero pasado, en Tala Pozo.