Las intensas lluvias del fin de semana no discriminaron ningún punto cardinal de Tucumán. Tanto en el norte como en el sur de la provincia se desbordaron canales y arroyos, hubo anegamientos en los caminos y cientos de familias quedaron aisladas.

El Comité de Emergencia de la Provincia dividió sus tareas en dos partes: un equipo se dirigió al norte y otro al sur para atender a las personas que fueron afectadas, señaló Ramón Imbert, de Defensa Civil de la Provincia. A él le tocó dirigirse al departamento Burruyacu.

"En Garmendia y en Pampa Pozo pudimos entrar recién hoy, con mucha dificultad, a llevar insumos y realizar traslados sanitarios de las personas que habían quedado aisladas y necesitaban atención médica", explicó el segundo en el mando de Defensa Civil.

Según el relevamiento que hicieron, unas 60 familias de Pampa Pozo quedaron aisladas y con sus casas inundadas. En el caso de Puerta Alegre, unas 30 familias fueron las afectadas. "En ambos casos, estamos hablando de prácticamente toda la población", señaló.

Con un unimog, tractores y vehículos 4x4 pudieron ingresar a los pueblos a atender las necesidades de los afectados. "En varias ocasiones estuvimos muy cerca de que se quedaran los vehículos. Si bien la gente ya no tiene agua dentro de las casas, la lluvia sostenida durante toda la noche hizo que se mantuviera el caudal en ríos, canales y arroyos, así que seguimos complidados", señaló Imbert.