Suma, luego existe. Así se resume la filosofía de este Atlético de octubre, que en las últimas tres fechas embolsó más puntos que en las ocho anteriores y ya comienza a mirar la tabla con otros ojos. 

Todavía le falta, por supuesto, pero a veces lo que hace falta para terminar de despegar es sacarse de encima el lastre anímico. Y Atlético va tomando confianza, a pesar de las falencias de su juego que lo hacen pasar algunos sofocones, como los de ayer. 

Por suerte -o por yeta de Patronato- los palos fueron un defensor más y ayudaron a sumar un eslabón más a esta mini racha que el “Decano” intentará estirar el sábado contra Colón. Si octubre fue bueno, noviembre puede ser aún mejor.