Probablemente no haya habido momento del partido contra Unión en que San Martín haya merecido menos hacer un gol que cuando lo hizo. En esos primeros 20 minutos no había generado ni la más mínima inquietud a la defensa “tatengue”, pero ahí vuelve a advertirse la importancia de la efectividad como virtud en un delantero. Y Franco Costa la tuvo para aprovechar la primera ocasión que tuvo de mandar el cuero a la red y poner en ventaja a San Martín. Eso sí, primero tuvo que aparecer el distinto, Claudio Bieler, para servirle una asistencia perfecta de cabeza hacia atrás, como si tuviera ojos en la espalda; el ex Arsenal hizo la diagonal, esperó la salida del arquero y definió cruzado, como manda el manual.

“Estoy contento, porque es algo que venía buscando hace mucho. No pude tener muchos minutos en Primera durante mi paso por Arsenal, y ahora me tocó estar desde el arranque y convertir. Me hubiera gustado que fuera con un triunfo”, desdobló sensaciones el 11 luego de marcar frente a la tercera defensa menos vencida de la temporada anterior.

San Martín debe tomar nota y aprender

“Pensábamos que teníamos los tres puntos en casa, lo veníamos controlando bien. Una jugada desafortunada nos deja un sabor amargo. Hay bastantes cosas para trabajar durante la semana; nos complicó empezar a perder las segundas pelotas, nos metimos atrás, caímos en un pozo de imprecisiones y eso nos impidió hacer el juego que queríamos. Pero también hay para rescatar algunas cosas positivas que nos van a ir encaminando”, analizó Costa, quien debió salir en el segundo tiempo por una molestia en el gemelo. De todos modos, aclaró que fue sólo por precaución. “Fue una contractura nomás. Ya había sentido antes la molestia, pero cuando la volví a sentir pedí el cambio para no arriesgarme a tener más más tiempo de recuperación después”, comentó.

Lo que se dijo en las redes sobre el debut de San Martín en la Superliga

San Martín deberá visitar el domingo a Rosario Central, el nuevo líder del torneo. “Sabemos que se trata es un rival difícil y en una cancha muy dura. Pero nosotros tenemos nuestras armas para lastimarlo”, confía Franco.