La Unión Tranviarios Automotor (UTA) confirmó esta noche que la medida de fuerza que arrancó este jueves a las 9 se extenderá mañana al mediodía ante la falta de respuestas, y que los coches permanecerán estacionados en doble fila, sobre las esquinas e incluso sobre el sector izquierdo de las calles. Desde las 10, en tanto, se realizará una audiencia en la Secretaría de Trabajo entre empresarios y el gremios para tratar de llegar a un acuerdo.

Representantes del gremio exigen el pago del 100% de los sueldos adeudados a sus trabajadores. “La última palabra la tienen los empresarios”, dijo ayer a LA GACETA César González, secretario general de UTA.

El paro comenzó a las 8.30 y los choferes empezaron a dejar los colectivos estacionados en distintas calles de la ciudad, lo que complicó el tránsito durante todo el día. Algunos además pararon los ómnibus en doble fila o incluso en el sector izquierdo de las calles, algo que alteró aún más los ánimos en las calles.

Enrique Romero, subsecretario de Tránsito y Transporte de la capital, comentó que se elaboraron las actas correspondientes a todos los colectivos que están mal estacionados y en doble fila, más de 800.

Los empresarios lamentaron la medida de fuerza y renegaron por la situación económica que atraviesan. “Hasta último momento tratamos de llegar a un acuerdo para levantar la medida”, explicó antes de la medida de fuerza Jorge Berreta, vicepresidente de la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat).

El ministro de Gobierno y Justicia, Regino Amado, le solicitó al intendente capitalino, Germán Alfaro, que convoque al diálogo intersectorial a fin de resolver el problema que afecta al servicio público de transporte urbano.

"Miramos con preocupación la situación que están viviendo los usuarios que intentan llegar a sus lugares de trabajo y no lo pueden hacer por este paro, pero también entendemos las necesidades de los trabajadores", sostuvo Amado.