La detención de dos miembros de Institutos Penales le dio un nuevo impulso a la causa que investiga el asesinato de un preso que denunció la venta de drogas en el interior del penal.

Walter Pato, jefe del Departamento de Personal, y Fernando Cisterna, responsable de las Unidades 1 y 2 del penal de Villa Urquiza, se entregaron a la Justicia en los últimos minuntos del domingo.

Estos dos funcionarios fueron procesados por la fiscal Adriana Giannoni, que investiga el crimen de Sebastián Fernando Medina, un preso asesinado en el patio de la penitenciaría luego de que denunciara a los guardiacárceles por la venta de drogas en el interior del penal.

El caso derivó en el reemplazo de las autoridades de Institutos Penales. A continuación, una serie de claves para entender un caso que generó una crisis en el Gobierno:

1- El 19 de noviembre pasado, Medina y otro interno fueron llevados desde comisaría 7ª al penal, sin que hubiera una orden escrita.

2- Tres días después, Medina fue asesinado a puñaladas por otro interno en el patio del Anexo 1 de la penitenciaría local.

3- El fiscal federal Pablo Camuña inicia una investigación por venta de drogas dentro del penal y apunta a guardiacárceles.

4- El 27 de diciembre, las autoridades del penal fueron indagadas. Pato y Cisterna quedaron detenidos; y horas después, liberados.

5- Dos días después, la fiscala Adriana Giannoni logró que otro juez tomara la decisión de pedir la detención de Cisterna y Pato.

6- En la noche del domingo, los funcionarios penitenciarios se entregaron en la sede de Investigaciones.