SAN PABLO.- Los cancilleres del Mercosur, el bloque económico más importante de la región, suspendieron ayer de manera permanente a Venezuela al considerar que rompió “el orden democrático”, tras la instalación de la Asamblea Constituyente. Los representantes de los países fundadores - Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay- decidieron aplicar la cláusula democrática, que prevé la medida. Justificaron la decisión en que el Gobierno de Nicolás Maduro violó las normas de respeto democrático en el proceso de elección y debido a la situación de los opositores detenidos por el Gobierno.

Los ministros de Relaciones Exteriores de Brasil, Aloysio Nunes; de Argentina, Jorge Faurie; de Paraguay, Eladio Loizaga y de Uruguay, Rodolfo Nin Novoa, se reunieron en la ciudad brasileña de San Pablo. La declaración conjunta remarcó el compromiso de los estados parte de trabajar en la búsqueda de una solución negociada y duradera para el bienestar y desarrollo del pueblo venezolano. El objetivo, explicaron, es que asuma un Gobierno de transición para el restablecimiento de la democracia mediante elecciones.

La medida tendrá efectos más políticos que económicos. El canciller brasileño negó que la suspensión genere la interrupción de los acuerdos económicos y migratorios que el bloque mantiene con Venezuela. Estará limitada la participación de ese país en los órganos del armado (derecho a voz, pero sin voto), por ejemplo, pero seguirá ejerciendo sus derechos arancelarios.

Nunes explicó que los protocolos del bloque no prevén la expulsión definitiva de los miembros. “Queremos que Venezuela vuelva, que se reencuentre con la democracia y pueda volver a participar de un organismo que había integrado”, explicó Nunes.

El paraguayo Loizaga recordó que Venezuela nunca adhirió al protocolo de derechos humanos del Mercosur. Por último, Faurie declaró que “sin democracia no se es parte del Mercosur”.

“Improcedente”

El Gobierno de Maduro rechazó la suspensión. “Venezuela ratifica enfáticamente que resulta improcedente la aplicación toda vez que se fundamenta en falsos supuestos, en presunciones ilegítimas”, argumentó el canciller Jorge Arreaza. Consideró que los países miembro convirtieron al Mercosur en un “órgano de persecución política contra Venezuela” y reclamó respeto de la autodeterminación de los pueblos.

La medida adoptada refuerza las sanciones que ya pesaban contra Venezuela, que había sido suspendida temporalmente del bloque en diciembre, también acusada de no respetar el orden.

La relación entre Venezuela y el Mercosur se tensó el año pasado después de que Caracas asumiera a mitad de año la presidencia pro-témpore de forma unilateral. La elección de la Asamblea Constituyente, que debe elaborar una nueva Carta Magna, ha aumentado el aislamiento regional.

Venezuela había entrado al bloque en 2012, por la afinidad ideológica entre los gobiernos que entonces encabezaban Hugo Chávez, Cristina Fernández, Lula da Silva y José Mujica. La invitación había sido hecha por Argentina y Brasil. (Especial)