La Municipalidad de San Miguel de Tucumán tomó este mediodía posesión efectiva de la casa Sucar, la vieja casona de Salta 532 que fue expropiada y declarada de interés público para que allí funcione un centro cultural. El intendente Germán Alfaro fue el encargado de abrir el candado que mantenía cerrados los portones principales.

En febrero, el Concejo Deliberante sancionó por unanimidad la expropiación de la casa Sucar, que pertenecía a una empresa privada que había realizado un pedido de demolición para construir un edificio. Ahora, la Municipalidad deberá abonar $ 33,5 millones, en un solo pago, como parte de la transacción.

En la Municipalidad comentaron que el objetivo es inaugurar la casona de Salta 532 como espacio para uso cultural el 9 de julio. Aunque ello, alertaron, dependerá de la velocidad con que se diagramen las obras de restauración.

Para conseguir los recursos necesarios para abonar los $ 33,5 millones por la casa Sucar, la Intendencia había propuesto vender la ex Dirección de Tránsito, ubicada en Buenos Aires primera cuadra. El proyecto, sin embargo, todavía no fue tratado en sesión.

La casona fue construida en 1923 por la familia Barbieri, y se la conoce por el nombre de la última familia que la habitó, los Sucar. Intervinieron en el diseño el arquitecto Luis Lucena y los artesanos italianos Perinotti y Colotti.