Después de un jueves agobiante, la fuerte tormenta registrada en la tarde de ayer provocó un marcado descenso de la temperatura, que pasó de 34° a 17° en unas horas. Las precipitaciones, aunque aisladas, persistirían todo el fin de semana donde la máxima rondará los 22°. 

Para este viernes se pronosticó nubosidad variable mientras que se esperan nuevas lluvias hasta el mediodía y vientos moderados del sudeste. La temperatura máxima no superará los 25°, con una humedad que mediará el 70 %, según informó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).   

El sábado y el domingo serán días inestables, con probables precipitaciones matinales y altos porcentajes de humedad. Se esperan mínimas de 15° y las máximas llegarían hasta los 22°. 

Estas condiciones climáticas se extenderían al menos hasta el viernes de la semana próxima, cuando recién volvería a salir el sol, para elevar de nuevo la temperatura.