La Copa Argentina sigue cumpliendo sueños y anoche le tocó a Liniers de Bahía Blanca la experiencia de enfrentar a uno de los grandes. Al cierre del partido ante River, jugado en Formosa, el defensor Andrés Podlesch no pudo contener la emoción y terminó con su cara llena de lágrimas. "Fue increíble. Soy hincha de River; nunca me imaginé esto. Mis amigos se juntaron a ver el partido en Bahía Blanca y Roca. Esto es para ellos", dijo el defensor nacido en Río Negro.

"Fui hincha de River toda mi vida. Jamás pensé que me iba a pasar esto, lo disfruté al máximo hasta que no di para más. Quiero agradecer a los jugadores de River, que siempre nos respetaron y jugaron al máximo. Pero hasta acá llegué. Terminé todo acalambrado. Hay una diferencia abismal, pero sabíamos a qué veníamos", resumió el marcador central de 30 años, que no olvidará jamás la noche del miércoles.