Con una frase que ya es una muletilla en su discurso, el gobernador José Alperovich expresó este mediodía que su desafío "es trabajar fuerte, durante las 24 horas", para remontar la crisis en la que se vio sumida la provincia en los últimos días.

Alperovich admitió, además, que la relación entre la sociedad tucumana y el gobierno y la Policía se ha resentido después de los saqueos y desmanes que se produjeron mientras duró la protesta policial.

"Algo se ha quebrado, se siente el quiebre en la sociedad -dijo el mandatario-. Lo que pasó fue gravísimo. Los tucumanos tuvieron que salir a defenderse porque la Policía, durante 24 horas, no actuó".

Sobre la marcha de anoche, que reunió a más de 15.000 personas en la plaza Independencia, expresó: "La gente tenía derecho a expresarse, se sintieron totalmente indefensos". Insistió, además, en que la protesta fue llevada a cabo "por una de las policías mejor pagadas del país".