Si algo le faltaba a este año electoral era una moratoria. Y el reciclado plan de facilidades de pago que se cocina en la Casa de Gobierno tiene las mismas características que el que terminó el año pasado (Ley 8.520). No hay un fin recaudatorio en este renovado régimen que -en los próximos días- irá en formato de proyecto de ley a la Legislatura. Los ingresos de la Dirección General de Rentas se incrementaron en torno de un 50% en el primer cuatrimestre respecto de igual período de 2012. Rozan los $ 1.200 millones en los primeros cuatro meses del año.
El argumento oficial es que se adoptará en consonancia con el plan lanzado hace poco por la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), cuya caducidad será el 31 de julio, el mismo día que finalizaría la sexta moratoria que instrumentará la gestión del gobernador José Alperovich en una década de mandato. Otro justificativo para el restablecimiento de la moratoria es evitar más de 10.000 juicios a contribuyentes de impuestos Automotor e Inmobiliario. Así, no se crisparán los nervios en un año de definiciones políticas.
Según pudo establecer LA GACETA, la moratoria arrancaría a mediados de mayo (si antes se reúne la Legislatura para convertir en ley el proyecto) y terminaría a fines de julio. Podrán acogerse todos aquellos que no lo hayan hecho en anteriores planes de pago. Si se hubieran adherido en otras moratorias, esta vez sólo podrán hacerlo por deudas no ingresadas o no reconocidas anteriormente. Será por deudas que vencieron al 30 de enero pasado. Al tratarse de un restablecimiento del último régimen, los beneficios serán los mismos: 80% por pago de contado; un descuento del 70% si se abona las facturas impagas hasta la finalización del año calendario y hasta un 50% en el caso de que el deudor decida abonar hasta en 60 meses.
En el caso de los que ingresaron a través de la moratoria dispuesta por la ley 8.520, tendrán posibilidades de reengancharse, pagando en cuotas hasta el 17 de junio, inclusive. Hasta ahora sólo 3.000 de los 10.000 morosos que estaban en condiciones de sumarse al reenganche que vence el martes que viene regularizaron su situación. Distinto es el caso para aquellos que no cumplieron, hasta ahora, con el pago regular de las cuotas del plan establecido mediante la ley 8.380. Esa franja de morosos tiene tiempo para hacerlo hasta el martes, indefectiblemente.
Lo novedoso
Las moratorias terminan donde comienzan las otras. Desde hace años, el Estado viene poniendo fin a los regímenes de financiación de deudas impositivas, pero luego se reciclan con otra denominación. Incluso, al lanzar la quinta moratoria de la era Alperovich se había derogado la Resolución Ministerial 012, el único medio de financiamiento que quedaba vigente.
La primera moratoria alperovichista se lanzó en 2005, cuando se presentaron 107.000 planes. Dos años más tarde se instrumentó el siguiente, con 36.000 formularios presentados por deudores. En 2009, otro año electoral, Alperovich apeló al tercer régimen de facilidades con 64.000 planes. La de 2011 fue la moratoria con menor captación de deudores (39.600) y la del año pasado terminó con la confección de 70.000 planes. En la mayoría de los casos, se renovaron los compromisos de pago.
En esta que se está gestando, el Poder Ejecutivo prevé la inclusión de las Contribuciones que Inciden sobre los Inmuebles de las comunas rurales (CISI comunal). Es la novedad del renovado sistema.
Otro aspecto saliente es que aquellos contribuyentes que tengan saldos a favor por el impuesto sobre los Ingresos Brutos pueden ingresar a la moratoria solicitando la compensación. Con esos saldos también se permitirá la regularización de las sanciones por multas.
Los evasores tendrán su oportunidad de evitar que la Dirección General de Rentas les inicie una denuncia penal tributaria. Al ingresar al régimen se los exime de la responsabilidad penal. Ahora se agrega la posibilidad de que los agentes de retención y de percepción depositen el monto retenido y no ingresado durante el primer trimestre del año, más allá de los 10 días de vencimiento establecidos por ley. Para evitar la denuncia penal, tendrán que regularizar el pago hasta el 14 de junio, de acuerdo con la iniciativa del Ejecutivo.
El fisco no quiere ponerle trabas al año político. Al Estado no le conviene iniciar juicios contra pequeños contribuyentes. La presión fiscal ya creció en 2012. Ahora es tiempo de renovar moratorias.