LA PAZ.- Necesitaba una bocanada de aire fresco antes de hablar. De oxígeno. Lionel Messi dejó todo en el "Hernando Siles", pero una vez más se va con las manos vacías, en lo que respecta a su deseo de marcarle a los bolivianos, el único combinado sudamericano al que todavía no pudo quebrar en las Eliminatorias. Igualmente, el crack rosarino de Barcelona sonríe (como puede) y se enorgullece por la gran tarde del seleccionado argentino y por el resultado.

"Terminamos cansados, pero conseguimos un punto buenísimo", festejó el 10 en declaraciones a la televisión después de terminado el partido. "La estrategia era tratar de aguantar porque sabíamos que ellos en el primer tiempo se iban a venir con todo. Lo aguantamos y nos llevamos un empate", declaró el capitán, que volvió a reconocer que se sufrió la falta de oxígeno en los 3.650 metros de altitud en la capital boliviana. "En cantidad de ocasiones no fueron más que nosotros. Tuvimos las nuestras también, fue muy parejo en ese sentido", opinó "La Pulga" sobre el partido, y luego reiteró su agrado por el punto cosechado en un escenario tan difícil para los visitantes.

Pese a sostener que todavía falta para asegurar la clasificación a Brasil 2014, aceptó que están ahí, a pasos nomás. "Todavía no, pero estamos cerquita", dijo el delantero con cierta cautela.

Otra mirada
Según el defensor Sebastián Domínguez, el planteo fue bárbaro, aunque el crédito queda para los volantes. "Ellos fueron los que sostuvieron el partido. Fueron los que más desgaste tuvieron", destacó el marcador central rosarino antes de despedirse. (DPA-DyN-Especial)