BARCELONA, España.- Su felicidad es plena y su orgullo es tan grande no cabe en su pecho. Es que ser padre no algo de todos los días. Por eso Lionel Messi, quien no quiso perderse hoy el partido de Barcelona ante Celta de Vigo, aprovechó la ocasión para homenajear a su hijo Thiago llevando el nombre de su heredero en sus botines. Cuando ingresó al campo de juego, "La Pulga" fue felicitado por la hinchada con carteles y una gran ovación. Durante el partido, todos aguardaban con gran expectativas un gol del rosarino, para observar su festejo. Pero la celebración quedó pendiente para otro partido ya que el argentino no contó con ninguna chance clara. LA GACETA ©