"Excalibur, una leyenda musical" es la nueva superproducción de Pepe Cibrián Campoy y Ángel Mahler, la exitosa dupla que a fuerza de los clásicos, magia, efectos especiales, lujosos vestuarios, gran despliegue técnico e imponentes escenografías, ha registrado ya su propia marca en los escenarios de todo el país. Este fin de semana la obra se representará en esta ciudad; cuenta con el protagonismo de Juan Rodó y un elenco de 30 cantantes y bailarines.

La historia es simple: Arturo debe reconquistar la espada Excalibur para tener el derecho a reclamar su reino. Luego de la muerte de su padre, Algac, el joven debe asumir que es un rey, su sucesor. Para ello contará con la guía de Merlín (Juan Rodó) y con el apoyo de su amada Guenevier.

El libro, letra, puesta en escena y dirección general es de Cibrián Campoy. La música original y las orquestaciones son de Mahler, quien comparte la dirección musical con su hijo, Damián.

La obra se estrenó en Buenos Aires en enero y ahora emprendió una gira por distintas ciudades del interior. En una entrevista con LA GACETA, Pepe Cibrián Campoy anticipó que en agosto presentará "Marica" en Tucumán, y que su vida ha cambiado: "ahora disfruto mucho de mis afectos y no necesito demostrarme tanto que soy algo". Señaló que la espada es una metáfora, y reflexionó que hay que enseñar a los jóvenes a luchar antes que a bailar por los sueños.

- La escenografía de "Excalibur", ¿es la misma que se presentó en Buenos Aires?
 - No, para hacer la gira tuvimos que hacer una nueva escenografía, porque era imposible trasladar a todas las provincias lo que se instaló en Buenos Aires. Además, montarla implica varios días. Pero quedó más linda, me gustó más como se presentará en la gira. De todas formas, la espectacularidad no se pierde, sigue siendo una producción muy grande, con luces y una nueva generación de LEDs y un sonido tremendo. Pero te aclaro que lo que interesa es la obra, no su espectacularidad. La torta puede tener el mejor decorado, pero… Vos podés tener toda la tecnología que te dan en el diario, pero si no sos buen periodista, no pasa nada.

- Vamos a ver una superproducción, sin embargo...
 - Por supuesto. No voy a ir a hacer el ridículo a Tucumán ni a ninguna otra provincia, donde siempre me reciben maravillosamente; no sería ético. Mirá que yo siempre hablo de provincias, porque no me gusta decir interior, odio esa palabra, me parece despectiva. A mi las giras me hacen engordar, me maravillan.

- En un musical, ¿qué importa más?
- La obra, definitivamente la obra, es el ser humano y sus pasiones, sus sentimientos. El libro marca todo, las luces, la música, el tema, la escenografía, todo. Por supuesto, la otra gran protagonista es la música, porque trasciende más, ya que la música no tiene idioma y se entiende universalmente. Pero el libro es fundamental.

- ¿Cómo te encontrás en tu carrera, vas a venir a la provincia este fin de semana?
 - No, no puedo. Estoy pasado de rosca y me voy de viaje de vacaciones. Tengo la agenda completa hasta 2013, pero estaré en agosto, con la obra "Marica". La verdad es que solo pido salud, porque me canso más que antes. Tengo un tío, una pareja y un perro, una vida con afectos que estoy disfrutando mucho. No necesito ya demostrarme tanto que soy algo. Amo tanto este país, y me están dando tanto que soy muy feliz.

- ¿Y de qué se trata "Excalibur"?
 - Siempre me encantaron la historia y el género de la caballería; parto de una leyenda, de un mito en este caso. Tomé a Merlín, que es un personaje divertido, pero para hablar de otras cosas. Así como en "Calígula" se habla contra la dictadura, aquí, la espada es una metáfora, porque uno es su propia espada; uno debe pelear por sus ideales, por su familia, por sus convicciones. La espada está dentro de nosotros, porque la vida no es magia. Trato de mostrar que en este mundo tinelesco, en el que se cree que por dos segundos se es famoso (me dan pena muchas veces), en realidad habría que luchar por un sueño, y no bailar por él. Hay muchos que tratan de banalizar todo. Hace 46 años que trabajo, acompañaba desde niño a mis padres. Y sé que la vida es una lucha constante.

TRES FUNCIONES

• Mañana a las 21 y 23.15, y el domingo a las 20, en el teatro Alberdi (Jujuy y Crisóstomo Álvarez).