OSLO, Noruega.- Anders Behring Breivik saludó con el puño derecho y se declaró penalmente inocente por la matanza de 77 personas en Noruega, en julio de 2011, cuya autoría admitió al iniciarse hoy el juicio en su contra.

La jueza, Wenche Elizabeth Arntzen, inició la audiencia, tras la entrada del imputado a la sala, quien una vez que le quitaron las esposas hizo su saludo de extrema derecha. Entre el público se encontraban familiares de las víctimas.

Breivik, de 33 años, extendió y levantó el brazo derecho, luego de golpearse el pecho a la altura del corazón con el puño cerrado, gesto que, según el manifiesto que publicó en internet, significa "la fuerza, el honor y el desafío a los tiranos marxistas de Europa".

Contra la islamización de Europa
El 22 de julio de 2011, Breivik, quien dijo actuar en repudio a la islamización de Europa, mató primero a ocho personas al detonar una bomba a los pies de la torre que alberga la sede del primer ministro laborista, que no estaba en el momento del atentado.

Luego, disfrazado de policía, durante más de una hora disparó contra miembros de la Juventudes Laboristas, que estaban reunidos en un campamento de verano en la isla de Utoya, cerca de Oslo. Ese ataque dejó otras 69 víctimas, la mayoría de ellos adolescentes.

Si Breivik es finalmente reconocido como responsable, se arriesga a 21 años de cárcel, una pena que podría ser prolongada mientras sea considerado como un condenado peligroso. En el caso contrario, será sometido a un tratamiento psiquiátrico de por vida. En la cárcel o en un manicomio, la fiscalía espera que el asesino no recupere nunca más la libertad. (AFP-NA)