SEVILLA, España.- La duquesa de Alba caminó hacia el altar con un vestido rosa pálido, diseñado por los conocidos modistos sevillanos Victorio y Lucchino y zapatos de Pilar Burgos.

Los propios diseñadores, muy concientes de su papel, enviaron a los periodistas un boceto del vestido, comentó el diario El Mundo.

Se trata, según Victorio y Lucchino, de un "vestido de estilo romántico realizado en gasa de seda natural de color rosa coquillaje y encaje de Balencie al mismo tono. El escote barco con puntas de encaje encoladas en la gasa que se va confundiendo con la piel".

"Las mangas abullonadas a mitad del brazo y van salpicadas de pequeños jazmines en organza de distintas gamas de rosas y grises humo rematadas con pequeñas perlas al tono. Cuerpo y cadera de encaje entolado, falda algo fruncida acabada en pequeños volantes de gasa con entredoses de encajes que dejan entrever otros de organza plisada de un color más subido de tono, un guiño en la cintura que se ajusta con un lazo de terciopelo de seda color verde lima. Los zapatos son unas manoletinas de encaje y gasa al tono del vestido con jazmines igual que en manga", completa la descripción que enviaron los modistos a la prensa.

El novio, Alfonso Díez, con chaqué negro y chaleco gris, llegó al Palacio de Duñas con la madrina del enlace, Carmen Tello.

Tello, esposa del torero Curro Romero (lo que la convierte casi en parte de la aristocracia, según los códigos españoles), llevaba un vestido rojo y una mantilla de color crema. (Especial)