WELLINGTON, Nueva Zelanda.- Hasta las 12.50, era un día más en Christchurch. Un minuto más tarde, la Tierra rugió, la ciudad se transformó en una enorme montaña de escombros, y la desesperación se apoderaron de los habitantes. Hasta el momento, son 65 las víctimas fatales. El luto se apoderó de Nueva Zelanda en uno de sus días más devastadores de su historia... (Especial)