El crecimiento de China en el panorama económico mundial modificó las piezas de las grandes potencias. Actualmente el gigante oriental es la segunda economía del mundo y desde ese lugar continúa su expansión. Sin embargo, la valuación de su moneda, el yuan, es un factor de conflicto para algunas de las economías con las que comercializa. Estados Unidos es su principal enemigo en la llamada guerra de monedas. 


El gobierno de Barack Obama afirma que el yuan esta subavaluado y afecta la balanza comercial de los países con los que los negocia. Como una señal para bajar la temperatura que estaba cobrando esta situación en el Foro Económico Mundial de Davos China anunció que abrirá el yuan cuidadosamente en función de las necesidades del mercado. "Durante el próximo año o para un período aún más largo, China continuará adhiriendo a nuestro mecanismo de liberalizar el yuan según las necesidades del mercado", afirmó Chen Deming, ministro de comercio de China. 

El yuan se convirtió gradualmente en una moneda más internacional impulsado especialmente por su mercado externo en Hong Kong. Se espera que el yuan llegue a cotizar a 6,3 yuanes por dólar a fines del 2011. De esta manera, China busca que su moneda se convierta en la tercera moneda con mayor peso internacional junto al dólar y el euro.