La investigación judicial que rodea a la Asociación del Fútbol Argentino sumó un capítulo clave con la reconstrucción de la maniobra financiera mediante la cual al menos 42 millones de dólares habrían sido desviados desde una empresa autorizada por la propia AFA hacia cuatro sociedades radicadas en Miami sin actividad comercial comprobable. Los detalles surgen de una investigación publicada por La Nación, firmada por Ignacio Grimaldi, Nicolás Pizzi y Hugo Alconada Mon, basada en documentación bancaria obtenida tras la intervención de la Justicia de Estados Unidos.
El origen del esquema se remonta a diciembre de 2021, cuando el comité ejecutivo de la AFA aprobó por unanimidad la designación de TourProdEnter LLC como agente comercial exclusivo para la explotación internacional de los derechos del organismo. La empresa había sido creada apenas cuatro meses antes en Florida y quedó bajo la administración de Erica Gillette, pareja del productor teatral Javier Faroni, un hombre de estrecho vínculo personal con el presidente de la AFA, Claudio “Chiqui” Tapia.
A partir de ese momento, TourProdEnter pasó a concentrar la recaudación vinculada a tres grandes fuentes de ingresos: los sponsors de la selección argentina, los derechos de televisación y la organización de partidos amistosos en el exterior. Según los registros analizados, entre 2022 y 2025 la firma acumuló más de U$S 260 millones en cuentas abiertas en cuatro bancos estadounidenses.
Los fondos ingresaron principalmente a cuentas del Bank of America, Synovus, Citibank y JP Morgan. Una parte de ese dinero se utilizó para cubrir gastos operativos de la AFA, tanto en la Argentina como en el exterior. Sin embargo, la investigación detectó que una porción significativa tomó otro destino.
Los movimientos bancarios revelan que al menos 42 millones de dólares fueron transferidos de manera reiterada a cuatro sociedades de responsabilidad limitada constituidas en Miami: Soagu Services LLC, Marmasch LLC, Velp LLC y Velpasalt LLC. Los giros se realizaron mediante transferencias constantes de montos de cinco y seis cifras, a pesar de que ninguna de esas empresas registra empleados ni actividad comercial verificable.
En concreto, Soagu Services LLC recibió U$S10,8 millones; Marmasch LLC, U$S13,4 millones; Velp LLC, U$S3 millones; y Velpasalt LLC, U$S14,7 millones. Tres de las cuatro sociedades comparten domicilio legal en un edificio ubicado en la calle Ives Dairy Road, en Miami, donde funcionan oficinas que ofrecen servicios de “oficina virtual”, una modalidad habitual para estructuras societarias sin presencia real.
Otro dato que refuerza las sospechas es que las cuatro empresas utilizaron como agente registrador a Registered Agents Inc, una firma con sede en Wyoming que quedó bajo la lupa de investigaciones periodísticas internacionales por facilitar la creación masiva de sociedades de papel. Además, los titulares de tres de esas cuatro LLC residen o desarrollan su actividad en la ciudad de Bariloche, lejos del lugar donde supuestamente operan las empresas.
Las cuentas bancarias de TourProdEnter figuran formalmente a nombre de Gillette, quien en redes sociales se presenta como dedicada de manera exclusiva a tareas familiares. Faroni, en tanto, aparece como firmante en una de las cuentas y posee tarjetas de crédito asociadas a otras. El empresario teatral tiene, además, antecedentes políticos ya que integró el directorio de Aerolíneas Argentinas durante el gobierno de Alberto Fernández y fue diputado bonaerense por el Frente Renovador, el espacio liderado por Sergio Massa.
Consultados por La Nación, ni Gillette ni Faroni respondieron a las preguntas formuladas. Sin embargo, personas cercanas al empresario señalaron que TourProdEnter cumple funciones de logística, cobro y pago para la AFA en el exterior, siempre, según esa versión, bajo instrucciones formales de la entidad y dentro del marco del contrato vigente.
La investigación también detectó otro destino relevante para los fondos administrados por TourProdEnter. Según la documentación analizada, U$S 109,9 millones fueron transferidos a Adcap Uruguay Agente de Valores, una entidad regulada por el Banco Central del Uruguay, especializada en la gestión de inversiones y liquidez para empresas e instituciones. La mayor parte de esos movimientos se realizó desde la cuenta del Bank of America, y algunos giros consignan como concepto pagos a proveedores vinculados a la AFA.
Desde Adcap confirmaron que tanto TourProdEnter como la AFA son clientes de la firma y explicaron que las operaciones se canalizaron a través de vehículos financieros regulados, en un contexto marcado por el cepo cambiario y la brecha entre el dólar oficial y los tipos de cambio alternativos vigentes en la Argentina.
La reconstrucción de esta operatoria aporta una pieza central para comprender el entramado financiero que ahora investiga la Justicia. La combinación de una empresa creada poco antes de asumir un rol estratégico, el manejo de cientos de millones de dólares fuera del país y el desvío de fondos hacia sociedades sin actividad visible configura un esquema que quedó bajo una lupa cada vez más intensa.
Las revelaciones se suman a un escenario judicial complejo para la conducción del fútbol argentino, con causas abiertas, levantamiento de secretos bancarios y peritajes en marcha. En ese contexto, la maniobra que permitió el desvío de millones de dólares aparece como uno de los ejes clave para determinar responsabilidades y dimensionar el alcance real del circuito económico que rodea a la AFA.