La cena de Nochebuena representa un momento de reunión donde la comida ocupa un lugar central, pero quienes requieren una dieta libre de gluten suelen enfrentar dificultades para encontrar opciones sabrosas. El pan dulce tradicional sin TACC suele tener un costo elevado en tiendas especializadas y muchas veces su textura resulta seca o quebradiza si no se utiliza la receta correcta. Por esta razón, preparar una versión casera permite ahorrar dinero y asegurar un producto con miga esponjosa que todos disfruten por igual.

Pueden faltar cosas en la mesa esta noche, pero no el pan dulce

La experta Alejandra Budán comparte una fórmula probada que garantiza éxito incluso para personas principiantes en la cocina celíaca. La clave del resultado final reside en utilizar ingredientes frescos y seguir pasos específicos que eviten el endurecimiento de la masa durante la cocción. Esta propuesta busca que ninguna persona quede excluida del brindis navideño por motivos alimentarios, ofreciendo una alternativa aireada y deliciosa.

Cómo preparar el pan dulce perfecto

-270 gramos de premezcla sin TACC.

-1 cucharadita de goma xántica.

-1 cucharada de polvo para hornear apto para celíacos.

-25 gramos de levadura fresca o 10 gramos de levadura en polvo.

-150 cc de leche tibia.

-2 huevos.

-50 gramos de manteca fría.

-50 gramos de azúcar.

-1 cucharada de miel.

-1 cucharadita de esencia de vainilla y 1 de agua de azahar.

-Ralladura de un limón.

-150 gramos de frutos secos, frutas abrillantadas o chispas de chocolate.

Cómo preparar el pan dulce sin gluten 

Mezclar la levadura con la leche tibia y una cucharadita de azúcar hasta que genere espuma. En un recipiente aparte, batir los huevos junto con el azúcar restante, la miel, las esencias y la ralladura de limón. Unir ambas preparaciones líquidas una vez que la levadura esté activa y burbujeante.

Combinar los ingredientes secos: la premezcla, la goma xántica y el polvo para hornear. Agregar la manteca fría y desarmarla con un tenedor o espátula para crear un arenado, evitando tocarla directamente con las manos para que el calor corporal no la derrita. Incorporar los líquidos a esta mezcla hasta lograr una masa integrada y bien unida.

Pasar los frutos secos, las frutas o el chocolate por una cucharada de premezcla antes de sumarlos a la preparación. Este truco permite que los agregados se distribuyan de forma pareja y evita que caigan al fondo del molde durante el horneado. Volcar la mezcla en moldes, preferentemente pequeños, hasta cubrir tres cuartas partes de su capacidad.

Dejar que los panes descansen en un lugar cálido durante 30 minutos para que aumenten su tamaño. Mientras tanto, encender el horno a 180 grados para asegurar un precalentamiento adecuado. Cocinar las piezas por aproximadamente 20 minutos si los moldes son de cuarto kilo, o más tiempo si se utilizan envases grandes.