Carlos Abeldaño continúa siendo parte del día a día de la Primera de Atlético. Pese a las versiones que lo vinculaban con la Reserva para disputar el partido contra Vélez, el joven delantero seguirá entrenándose bajo las órdenes de Lucas Pusineri y no será parte del viaje a Buenos Aires para el compromiso del miércoles frente al “Fortín”.

La decisión responde a la necesidad de reforzar el frente de ataque del equipo principal, luego de la salida de Mateo Coronel al fútbol mexicano. Con esa baja sensible, Abeldaño se mantiene como una alternativa para el cuerpo técnico en una zona donde el “Decano” quedó con menos variantes.

El juvenil, que ya venía mostrando buenos rendimientos en la división de Reserva y anotó seis goles, suma entrenamientos con el plantel profesional y se posiciona en la consideración del entrenador para futuros partidos del Clausura. La prioridad inmediata de Pusineri está puesta en el duelo contra River, previsto para el fin de semana, y allí las principales cartas ofensivas que analiza son Mateo Bajamich y Leandro Díaz, aunque Abeldaño permanece como una opción en el recambio.

La apuesta del DT pasa por encontrar el equilibrio en un equipo que necesita mayor eficacia en el área rival. Con Bajamich, que aporta movilidad y puede desempeñarse como segunda punta, y con Díaz, que garantiza presencia física y experiencia en el ataque, la dupla técnica busca darle al “Decano” la profundidad que le ha faltado en los últimos encuentros.

En ese contexto, Abeldaño se mantiene en el radar y podría tener la oportunidad de sumar minutos en el corto plazo. Su presencia en la Primera refleja la intención del club de darle rodaje a las promesas formadas en Ojo de Agua y, al mismo tiempo, mantener variantes frescas en un torneo que se presenta exigente y con calendario apretado.

De cara al choque contra River, la expectativa crece. Atlético sabe que necesita hacerse fuerte en casa y encontrar soluciones ofensivas que le permitan recuperar terreno en la tabla. Abeldaño, mientras tanto, espera su momento, sabiendo que la confianza de Pusineri lo acerca cada vez más a dar el salto definitivo.