El duelo entre Atlético y Rosario Central no solo será especial por la presencia estelar de Ángel Di María. También marcará un hecho inédito en el Monumental José Fierro: por primera vez desde el regreso del público visitante al fútbol argentino, el “Decano” recibirá a una numerosa parcialidad rival (se estima alrededor de 3.250 hinchas “canallas”). Para garantizar que todo transcurra en paz, se montará un fuerte operativo de seguridad.

Jorge Llarrull, subsecretario de seguridad de Atlético, detalló los preparativos tras una reunión con el ministro de Seguridad de la provincia, Eugenio Agüero Gamboa,, el jefe de la Policía, Joaquín Girvau, el presidente del “Decano”, Mario Leito, y el resto de la cúpula policial. “Fuimos a pedir colaboración porque es un partido muy importante. Viene Di María, hay mucha expectativa”, afirmó.

Según Llarrull, se espera el arribo de 3.250 hinchas de Rosario Central, distribuidos en 3.000 populares y 250 plateas. Para ellos se preparó un operativo especial, con 400 policías afectados, el doble de lo habitual, y también será reforzado por la seguridad del estadio.

“La gente de Rosario va a venir por ruta 34. En Las Cejas habrá un operativo de control con colaboración de Gendarmería, Tribuna Segura y unidades motorizadas. Van a ser escoltados hasta el estadio”, detalló.

Los micros de la delegación “canalla” estacionarán sobre calle Perú, entre Rivadavia y Juan B. Justo, y desde allí los hinchas accederán al sector visitante a través del pasaje Atlético, que desemboca en calle Bolivia. Dentro de la cancha, se realizarán dos pulmones a los costados de la platea y de la zona popular.

Una experiencia segura y controlada

Llarrull remarcó que el operativo también busca garantizar tranquilidad para los vecinos. “Va a estar todo muy controlado. Los visitantes bajan directo del colectivo y entran al estadio. No van a romper ni tocar nada”, explicó. Además, para que los hinchas visitantes puedan esperar cómodamente en el estadio, Atlético ofrecerá servicio de comida y bebida (sin alcohol). “Vamos a armar un sector para que tengan algo para consumir, porque estarán en la cancha tres o cuatro horas antes”, indicó.

Prohibido el hielo

Otra novedad será la prohibición de ingresar con hielos sólidos, una práctica habitual que genera conflictos. “Venimos sufriendo con eso. Hay que erradicarlo. Si se golpea a alguien y te suspenden la cancha, perdés puntos”, advirtió.

El club ofrecerá alternativas: bebidas en tachos con agua fría o con hielo molido. “Estamos en invierno, no hace falta que esté tan fría la bebida. Es el momento de cortar con esto”, explicó Llarrull.

Un ensayo para lo que viene

El partido con Central será una prueba clave. Luego vendrán Talleres y River, y para este último duelo se analiza la posibilidad de aceptar visitantes. “Este operativo también sirve para demostrar que la provincia está preparada para partidos grandes. No es solo por el club, también es una muestra de que Tucumán puede estar a la altura”, cerró Llarrull.

Con controles reforzados, logística detallada y un clima de fiesta en puerta, el Monumental José Fierro se prepara para una noche distinta. Una noche en la que el fútbol, el folclore y la seguridad deberán convivir en armonía.