Sebastián Uro revivió su dolor de la pérdida de un padre el lunes, cuando se enteró de la muerte de Francisco. Si bien no tuvo una relación directa y personal, hace cinco años el duelo del tucumano por la pérdida de su progenitor Manuel Gerardo los vinculó imprevistamente.
En 2019, Uro visitó el Vaticano y le dejó un escrito al Papa en una de las audiencias semanales. “Le pedí que rece por el alma de mi padre y a los dos meses me contestó con una carta que me llegó a los dos meses a mi casa, en un barrio popular. Un día sonó el timbre y era un sobre con membrete y sello del Vaticano y una respuesta por escrita de él, firmada por monseñor Roberto Cona”, recuerda.
“Su Santidad agradece su delicada muestra de confianza y pide al Señor que les conceda fortaleza en la fe para afrontar el dolor con esperanza cristiana. Sólo en Cristo muerto y resucitado encontramos la salvación y redención. Con Él, el mal, el sufrimiento y la muerte no tienen la última palabra, porque Él nos da esperanza y vida. Con estos deseos, el Papa Francisco ruega que recen por él y por su servicio al santo Pueblo de Dios, a la vez que los encomienda al amparo maternal de la Santísima Virgen María, Madre de misericordia, les imparte de corazón la Bendición Apostólica que complacido hace extensiva a los demás miembros de su familia y seres queridos”, se lee en la misiva, fechada en enero de 2020.
El vínculo del Papa Francisco con la Cultura de TucumánEl texto toma relevancia ante el deceso del pontífice. Uro lo despidió en sus redes sociales: “¡Descansa en Paz, Papa Francesco! Muchas gracias por rezar por mi viejo Lalo, no nos vamos a olvidar de ese gesto tan noble que tuviste de escuchar nuestro pedido. Fue y es muy importante para nuestra familia. Que Dios te reciba y descanses de tus dolencias”.
Vínculos con la cultura
Además de procurador, Uro es músico y gestor cultural, y desde esta mirada destacó que “fue muy importante la vinculación del Papa con la cultura y específicamente con la literatura”, y recordó que fue profesor de Literatura y Psicología en el Colegio de la Inmaculada Concepción de la Capital Federal.
“En sus entrevistas relacionadas con lo cultural hablaba sobre todo de Fiódor Dostovievski, de su relación cercana con Jorge Luis Borges. Hay una carta a los candidatos al sacerdocio y a los cristianos en general en la que refiere a la lectura como un camino a la madurez personal, como una forma de escucha y de desenvolvimiento de las personas, como ‘un laboratorio fotográfico en el que es posible elaborar las imágenes de la vida’, según una hermosa frase que leí. Era una persona muy leída, que podía plantear los beneficios de la literatura. En sus mensajes te hablaba de educar el corazón y la mente para aprender a escuchar, una idea increíble”, agregó.
Concierto gratuito por el papa Francisco: cuerpos estables de Tucumán reponen en el san martín el Requiem de MozartEn su papado, Francisco participó de numerosos recitales de cantantes argentinos como Soledad Pastorutti, Axel, Patricia Sosa, Teresa Parodi, Manuel Wirtz, Leo Dan y León Gieco (fue el último, en 2023, cuando cantó “Solo le pido a Dios” en el Vaticano). “Respecto a la música, era muy fanático del tango y leí -aunque no pude confirmarlo- que tenía una cercanía con el rock de Fito Páez y de Charly García, quien en su tema ‘La máquina de ser feliz’, que salió en el disco ‘Random’, afirma que esa máquina la tiene el Papa”, concluye.