16 Junio 2023 Seguir en 
COMPARACIONES. La carga genética nos hace parecidos a los padres.
En ocasiones nos preguntamos qué genes heredamos de nuestros padres, cuáles de sus características podrían llegar a repetirse en nosotros, tales como el carácter o la personalidad, la calvicie, la predisposición a determinadas enfermedades, entre otras.
Hay casos en los que las mutaciones de algún gen se pasan a un hijo, es así como, por ejemplo, se transmiten enfermedades mediante la genética. Pueden ser diferentes tipos de cáncer, obesidad, miopía, distrofia muscular, fibrosis quística, hasta la predisposición a sufrir infartos. Estos son algunos problemas de salud más comunes que se heredan de padres a hijos.
El ADN, o ácido desoxirribonucleico, es el material que contiene la información hereditaria en los humanos y casi todos los demás organismos. Casi todas las células del cuerpo de una persona tienen el mismo ADN. Los hijos heredan pares de genes de sus padres, recibiendo una combinación única de características genéticas. Al igual que los genes influyen en los rasgos físicos y de personalidad, también pueden ser responsables de predisposiciones a ciertas condiciones médicas.
Por eso conocer el material genético ofrece información valiosa sobre la salud personal, permite la personalización de los cuidados médicos, facilita la toma de decisiones reproductivas informadas y nos proporciona información de los genes obtenidos por nuestra familia.
“Cada individuo lleva dos ‘variantes’ para una misma característica o gen: una de ellas es heredada del hombre y otra de la mujer, una que consiguió expresarse físicamente y otra que quedó oculta. A la hora de tener un hijo, tanto el progenitor como la progenitora aportan dos variantes, es decir, que cada rasgo físico tendrá cuatro formas posibles”, explica Ricardo Di Lazzaro, socio fundador y director médico de Genera, el primer laboratorio de Latinoamérica especializado en genómica personal, en un comunicado de prensa.
Gracias a los test de ADN que la medicina permite realizar, cualquier interesado en descubrir su herencia genética puede obtener esa información. Mediante este análisis es posible identificar predisposiciones genéticas que ayudan a mantener una buena calidad de vida, con salud y prevenir problemas relacionados.
Qué se analiza
Entre las áreas que pueden ser evaluadas se encuentran deficiencias vitamínicas, propensión a la obesidad, intolerancia a la lactosa, nivel de fotoenvejecimiento, longevidad, tendencia a la calvicie de patrón masculino, formas de mejorar la resistencia física, ganancia de masa muscular, rendimiento deportivo, sensibilidad al sol, riesgo de acné, control del apetito emocional e incluso sensibilidad a la cafeína. Además, también se pueden analizar inclinaciones genéticas hacia enfermedades como el cáncer, el Alzheimer, el Parkinson, el infarto de miocardio, entre otras.
Los genes también revelan información sobre la historia de cada individuo, que se puede descubrir a través de pruebas de ascendencia y linajes maternos y paternos.
Hoy en día miles de argentinos deciden conocer más sobre su pasado, su presente y su futuro a través de un test de saliva que se realiza en dos minutos desde su casa.
“Mediante el examen de miles de puntos de ADN, se puede descubrir la historia genética de una persona hasta cinco generaciones atrás, que brinda la posibilidad de obtener información adicional sobre sus raíces”, agregó Di Lazzaro.
A través del test de ancestralidad se informa el origen del ADN de la persona, logrando una conexión con sus antepasados. Se muestran los resultados en un mapa, en el que se indican las zonas de donde proceden, con sus respectivos porcentajes.
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