San Martín: desactivar la “bomba”

San Martín: desactivar la “bomba”

El mal clima que se vive en La Ciudadela no condice con la posición del equipo en el torneo; pero es producto de algunas decisiones desacertadas que fueron “minando” el campo

SIN MARGEN. De Muner y compañía no pueden fallar. El plantel retomó ayer las prácticas tras la dura caída en Campana. SIN MARGEN. De Muner y compañía no pueden fallar. El plantel retomó ayer las prácticas tras la dura caída en Campana. LA GACETA / FOTO DE ANTONIO FERRONI

La derrota en Campana fue un golpe duro a la ilusión para San Martín. El equipo recibió un mazazo que lo dejó fuera de combate por el primer ascenso y complicó el panorama respecto al objetivo de terminar segundo (con nueve puntos de jugarse está a tres de Instituto, que además lo supera en diferencia de gol) para aprovechar ciertos beneficios de cara al Reducido.

Contra Villa Dálmine, el “Santo” volvió a sufrir, quizás, una de las peores falencias que tuvo durante esta temporada. La irregularidad casi no lo dejó vivir durante este 2022. De un partido en el que ganaba fácil, jugando bien y mostrando contundencia, pasaba sin escalas a otro en el que no se le caía ninguna idea y fallaba goles de manera increíble.

No supo aprovechar el envión de haberle ganado de buena manera al líder y volvió a mostrar un rendimiento olvidable. El sábado no jugó como un equipo que tiene deseos de ascenso, entró dormido (con una formación que no se entendió) y a los dos minutos pareció terminársele el partido. Y ese nivel, generó el repudió casi general de los hinchas. Porque a diferencia de Instituto, que antes también había perdido algunas chances concretas de pegar el salto, sacó fuerzas de la derrota contra Belgrano y con un sprint furioso parece decidido a quedarse con el segundo lugar de la tabla.

El sábado, Pablo De Muner fue tendencia en Twitter. Luego del partido, su apellido estuvo en el puesto 14 de lo más mencionado en Argentina en esa red social. Claro, los hinchas le recriminaron el mal paso del equipo por Campana, su decisión de no hablar que ya lleva 129 días y algunos puntos más.

Pero más allá de que durante el último tiempo en las redes sociales algunos fanáticos desbordaron, el hincha genuino, el que va a la cancha, casi nunca le soltó la mano ni al plantel ni al DT durante la campaña.

Pese a que en La Ciudadela perdió 0-4 contra Mitre de Santiago del Estero o empató 0-0 de manera consecutiva contra Atlanta, Chaco For Ever y Gimnasia de Mendoza, justo cuando tenía la chance de acercarse a la cima, los aplausos nunca estuvieron ausentes.

El equipo siempre se fue con un “aprobado” incluso cuando tuvo algunas producciones bajísimas. La única vez que los aplausos se mezclaron con algunos silbidos fue luego del empate contra el “Lobo” mendocino, cuando el equipo perdió la tercera chance en fila de descontarle puntos al “Pirata”.

Hoy, la sensación que se respira en el ambiente es la de un equipo que está fuera de toda pelea o, incluso, que está más cerca de la zona baja. En la calle, en los bares, en los gimnasios, o en cualquier escenario en el que confluyen dos (o más) hinchas de San Martín, se habla de lo “mal” que está el equipo. De que no tiene arreglo o de que el año parece perdido.

Sin embargo está tercero; aún con chances de pelear por el segundo puesto o sino con la oportunidad para mostrar fortaleza en los manos a manos del Reducido en el que se definirá el segundo boleto a la máxima categoría.

Que De Muner vuelva a hablar podría llegar a ser bueno en muchos aspectos. Por un lado el DT podría llevarle tranquilidad a los hinchas que se preguntan, algo preocupados, qué será del futuro del equipo en el cierre de la temporada. Pero además, y sobre todo fundamental, le quitaría la presión a sus dirigidos porque absorbería toda la atención. Esa, como líder de un grupo, podría llegar a ser una jugada maestra.

El torneo entró en la etapa de definiciones y en La Ciudadela deben entender que para lograr el objetivo trazado todos tienen que estar unidos, tomados de la mano y convencidos que todo puede ser mejor.

Humildad, carácter, templanza, esfuerzo y valentía son los valores que deben aparecer en su máximo nivel. Pero el primer paso, antes de ver o analizar si el equipo juega bien o mal, es indispensable desactivar el mal clima, desterrar lo malo.

El ambiente que hoy reina en Bolívar y Pellegrini semeja ser una “bomba” que amenaza con derrumbar los sueños y el esfuerzo que de casi 10 meses. Así, lograr la meta se le hará cuesta arriba a un San Martín que parece ser su principal rival en esta carrera. Por eso deben desactivarla.

Sin filas

Ayer por la tarde comenzó al venta de entradas para socios, de cara al duelo del sábado, desde las 16, contra Almirante Brown. Los interesados, pueden asegurar su lugar con tan sólo unos cuantos “clics”, ingresando a la web https://socios.casmt.ar.

Baja obligada

Hernán Pellerano se perderá, al menos, el juego del sábado por su expulsión en Campana. Además, el defensor sigue con cuatro amarillas por lo que cuando vuelva, estará al límite. Otro que suma cuatro amonestaciones es Juan Miritello.

Comentarios