Por Lucía Lozano
23 Octubre 2021
El peligro se renueva apenas comienzan los días de calor y nos invaden los mosquitos. Ante el virus del dengue, que transmite el Aedes aegyti, no contamos con muchas armas para defendernos. Sacar los recipientes con agua sigue siendo la estrategia más difundida a la hora de hacerle frente a una enfermedad que acompaña al hombre desde hace más de dos siglos. Por eso, despertó una gran expectativa la noticia sobre una vacuna que promete ser efectiva y segura.
La Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) ya recibió un pedido del laboratorio japonés Takeda Pharmaceutical Company Limited para aprobar la vacuna contra el dengue en la Argentina. También la autoridad sanitaria de la Unión Europea (EMA) tiene la solicitud para estudiarla. Se estima que, además, estará sujeta a la validación por parte de la FDA (Food and Drug Administration) de los Estados Unidos para fin de año.
Desde hace mucho tiempo se ha intentado desarrollar una vacuna contra el dengue. Aunque sí se presentaron algunas opciones, no resultaron ser muy seguras. Esta nueva vacuna, llamada TAK-003, ya terminó su fase III de prueba en más de 20.000 jóvenes de entre 4 y 16 años. El estudio, que duró 36 meses, se llevó a cabo en Brasil, Colombia, Panamá, República Dominicana, Nicaragua, Filipinas, Tailandia y Sri Lanka.
En sus resultados se destaca que la inmunidad alcanza los tres años desde su inoculación y que logró una eficacia del 62% en la prevención del dengue sintomático causado por cualquiera de los 4 serotipos en los participantes de la investigación con o sin exposición previa a la infección. Además, disminuyó las internaciones en un 83,6% y redujo en un 65,4% el desarrollo de la forma hemorrágica de la enfermedad.
Estas conclusiones fueron publicados recientemente en el Congreso de la Sociedad Latinoamericana de Infectología Pediátrica (Slipe 2021), en Buenos Aires. También se los registró en la prestigiosa revista de ciencia Clinical Infectious Diseases.
Según los investigadores de la vacuna, TAK-003 podría ayudar a prevenir brotes, a reducir las tasas de hospitalización y a proteger a las personas contra el dengue, independientemente de su exposición previa. “Es relevante destacar que no se identificaron riesgos importantes para la seguridad”, aclararon.
Alarma
El dengue genera especial preocupación en medio del calentamiento global, ya que los casos podrían ir en aumento en los próximos años. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) la enfermedad está dentro de las diez amenazas principales para la seguridad sanitaria.
Se calcula que alrededor de 400 millones de personas se infectan por año en todo el mundo con este virus. De estos, aproximadamente 500.000 se internan y 20.000 mueren. La incidencia en los últimos 50 años aumentó 30 veces.
Tucumán no es ajena a esta realidad. El año pasado registró la peor epidemia de esta patología. Se notificaron 7.806 casos. Hubo cuatro muertos y 1.000 pacientes fueron internados por su gravedad.
El dengue es una enfermedad infecciosa transmitida por los mosquitos Aedes. Hay cuatro serotipos de virus del dengue (DEN 1, DEN 2, DEN 3 y DEN 4). Cuando una persona se infecta dos veces, y con distintos serotipos del virus, corre un riesgo significativamente mayor de desarrollar la patología de manera más grave. Los síntomas son fiebre alta, sarpullido y dolor en los músculos y las articulaciones. En los casos más graves puede causar la muerte.
La buena noticia, según la infectóloga tucumana Aída Torres, es que los avances científicos revelan que la nueva vacuna tiene un enorme potencial para tratar los cuatro serotipos de la enfermedad. “Durante años se intentó desarrollar una vacuna que fuera buena y no hiciera daño. Pero no se lograba. Incluso era un riesgo para las personas que no habían tenido una infección previa”, explicó. Los resultados ahora -prosiguió- demostraron que es efectiva, tiene un buen perfil de seguridad y no genera eventos adversos graves, independientemente de que la persona haya o no padecido la infección previamente. “Es fundamental la aprobación por parte de las entidades regulatorias así ya se puede analizar su incorporación y uso”, dijo la experta, y no descartó que eso ocurra antes de fin de año.
¿En el calendario?
“Fue muy difícil conseguir una vacuna justamente porque había que desarrollar una que incluyera la inmunización para los cuatro serotipos”, señaló, por su parte, la doctora Cristina Argota, pediatra, infectóloga y docente de la cátedra Enfermedades Infecciosas de la Facultad de Medicina de la UNT.
Cuando la Argentina autorice el uso de la vacuna -según Argota- sería importante que esté presente en los calendarios nacionales. Y agrega: “atendimos muchos casos de chicos en el hospital de Niños. Si bien afortunadamente la mayoría de los casos cursan en forma leve o asintomática, es relevante destacar que el dengue grave es una urgencia médica con riesgo de vida”. Por otro lado, es una patología para la cual hay muy pocas opciones terapéuticas
Cómo será
El esquema de vacunación contra el dengue TAK-003 consiste en dos dosis con un intervalo de tres meses entre cada aplicación de una vacuna tetravalente. La vacuna se basa en un virus vivo atenuado del serotipo 2 del dengue, que proporciona la columna vertebral genética para generar inmunidad contra los cuatro serotipos contemplados en la vacuna.
Este punto es fundamental teniendo en cuenta los diversos serotipos del virus se extienden en países tropicales y subtropicales. En Brasil y Paraguay -por ejemplo- ya circulan los cuatro serotipos del virus. En Argentina, en la última epidemia, circularon dos tipos.
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