Mountain bike: semillero inagotable

El mountain bike es el deporte que más creció en los últimos años en nuestra provincia. Son cada vez más los que se suben a una bicicleta para desafiar las sendas, algo que se acentuó durante la pandemia. Es por eso que no sorprende que sean más de 20 las escuelitas o grupos de entrenamientos que funcionan actualmente en Yerba Buena, San Miguel de Tucumán y Tafí Viejo.

“Tuve la suerte de recorrer todo el país con el mountain bike y en la Argentina no hay ninguna otra provincia que tenga tantas escuelitas ni tantos bikers como Tucumán. Es el lugar donde más se practica este deporte”, contó Gabriel Quiroga, que tiene un grupo de entrenamiento para mayores de 15 años. “Lo que yo hago es una rutina más personalizada, muy distinto a una escuelita de mountain bike. Les armo el entrenamiento a través de una planificación de lo que tiene que hacer cada uno. Con mi grupo salimos a pedalear en los senderos, pero no estoy todo el tiempo atrás de ellos”, agregó “La Víbora”, ganador en tres oportunidades del Rally Trasmontaña (2001, 2002 y 2003).

“Gaby” destacó el crecimiento que tuvo el mountain bike en los últimos años y en especial en tiempos de pandemia. “Como no había entrenamientos de fútbol, de rugby ni de ningún deporte grupal, mucha gente se inclinó por el ciclismo de montaña. La demanda de bicicletas que hubo el año pasado fue impresionante. Había un momento en que, en las sendas de Horco Molle, prácticamente te andabas chocando con otros ciclistas.

Alejandro Palma y Antonio Quesada están a cargo del Blue Mountain Bike Park, donde funcionan dos escuelitas: una pública y otra privada. “Tenemos clases gratuitas y otras que son pagadas. Tenemos una escuela pública, en la cual trabajamos en forma conjunta con el área de deportes de la Municipalidad de Yerba Buena. Las clases son sin cargo y están dirigidas a menores de 13 años que asistan a establecimientos educativos públicos. Pueden concurrir con o sin bicicleta. A los que no tienen ‘bicis’, acá se la prestamos. Pueden venir de cualquier lugar de la provincia”, contó Palma, uno de los coach más experimentados de Sudamérica. “En el segmento privado, en el cual el costo es entre 2.000 y 3.500 pesos mensuales, trabajamos con chicos desde los tres años. Tenemos clases por la mañana y por la tarde. Son 10 profesores los que trabajan y contamos con más de 150 alumnos”, agregó.

El Blue Mountain Bike Park funciona en avenida Perón 1.050 y cuenta con un circuito que tiene todas las dificultades técnicas de un trazado internacional. “Hay diferentes obstáculos, como ser escalones, rampas y saltos. En este circuito hacemos que los bikers desarrollen todas las destrezas, para que después puedan practicar en los senderos. Antes de ir a entrenarse a las sendas, les hacemos una evaluación. Es por seguridad”, dijo “Tony” Quesada.

Leila Luque es la que dirige el Luque Team Biker Training, donde además de prepararlos para ser bikers, les enseña muchos secretos de las bicicletas. “La escuela está dividida para los que recién se inician en el deporte y para los que ya están más avanzados. Realizamos entrenamientos grupales y otros personalizados. Además, a todos les enseñamos cuáles son los componentes de la ‘bici’. Muchos se enfocan solamente en el entrenamiento, pero la parte mecánica también es clave”, dijo la cordobesa. “Nuestro punto de encuentro es la avenida Perón al 1.000. Dentro de los grupos hay bikers que quieren tener una planificación, porque saben claramente cuáles son sus objetivos. Algunos apuntan a prepararse para competir en carreras y otros lo hacen por estética o por salud”, explicó Leila.

“Tenemos cuatro niveles de entrenamientos. En todos los grupos se dan dos clases semanales y dos sábados al mes realizamos salidas largas de casi cuatro horas. Además, led damos una planilla de entrenamiento para que puedan trabajar durante los días en que salimos las sendas”, contó Soledad Auad.

Juan Valenzuela creó hace cuatro años el Pizza Team, donde hay dos grupos de entrenamientos. “Los martes y jueves, de 17.30 a 19, salimos a practicar con los principiantes. La mayoría son mujeres que recién están aprendiendo a andar en los senderos. En tanto, los lunes, miércoles y viernes ellas entrenan de 14.30 a 17 y los hombres lo hacen de 17.30 a 19. De los 25 alumnos, solamente tres compitieron en alguna carrera. La gran mayoría lo hace para disfrutar del mountain bike y de los hermosos paisajes que tiene Tucumán, aunque eso no quiere decir que después se animen y terminen siendo protagonistas en algunas pruebas”, indicó el “Pizzero” Valenzuela. “Nos reunimos en la avenida Perón al 1.600 y trabajamos en la reserva de Horco Molle, en El Cadillal y en Los Nogales. Para mí lo más importante es que la gente disfrute de andar en bicicleta”, precisó.

El mountain bike tucumano no para de crecer y el gran semillero con el que cuenta es una muestra cabal de que es así.