“Está mal, hemos naturalizado la inseguridad”

“Está mal, hemos naturalizado la inseguridad”

El asalto a un bar enfureció a vecinos y comerciantes. Ataques recurrentes en la zona.

TRANQUILO. El asaltante en el momento que estaciona su moto. TRANQUILO. El asaltante en el momento que estaciona su moto.

“Lamentablemente ya es normal que vengas caminando por la calle y te saquen un revólver. Es como que sabés que en cualquier momento puede pasarte y no te queda otra que esperar que pase”, contó resignado uno de los encargados de un bar de barrio Sur que fue asaltado ayer cerca de las 21 en boulevard Lavalle al 900. El joven, quien prefiere que su nombre se preserve, señaló que uno de los clientes a los que les robaron era amigo suyo.

El video de la cámara de seguridad no tardó en viralizarse en las redes sociales que tienen a la inseguridad provincial como temática de foro. En las imágenes se ve cómo el delincuente llega, estaciona su moto en la vereda a pocos metros de la confitería y se acerca caminando con la mayor naturalidad, sólo cubierto por un barbijo. El asaltante llega sin levantar sospechas hasta las mesas de afuera del negocio y saca una pistola con la que les apunta a tres cliente y se lleva dos celulares mientras uno de los clientes logra escaparse.

“No creo que el problema sea la zona; a mi madre la arrastraron para quitarle la cartera por la avenida Sarmiento; esto pasa en todos lados; pero sí, hace falta que pongan policías aquí porque es una zona muy concurrida y lo venimos pidiendo hace rato. Ayudaría mucho”, consideró el encargado, que dijo que recibió cientos de llamados de personas que se preocuparon al ver las imágenes que circularon en las redes sociales.

Los vecinos sí consideran que la zona está entre las preferidas de los delincuentes. Indican que aprovechan la onda verde de calle Jujuy y la falta de policías para escapar sin problemas hasta avenida Roca y de allí encarar para distintos destinos. “Con la pandemia esto había mejorado, pero ahora que volvieron a abrir el comercio los delincuentes volvieron. Uno ya teme hasta que le roben al perro sólo para hacer daño”, indicó Pía González, quien paseaba a su can por el boulevard. Pedro, el encargado de otro comercio, por su parte, señaló que se cansaron de pedirle a la Policía que blinde la zona. “A veces te dan bolilla y ponen a los agentes por un tiempito, pero después se van y vuelve todo a ser un caos”, dijo el encargado, que además recordó el reciente asalto en el que un delincuente murió desangrado cuando se le disparó el arma que llevaba oculta a la altura de la ingle. Ese hecho también quedó registrado en videos. “No les importan las cámaras, te atacan a cara descubierta”, añadió.

Mónica Liliana Díaz fue otra emprendedora que mostró su indignación con este nuevo ataque que azotó el barrio. “Nos van asaltando cinco veces; lo peor de todo es que más que lo que roban es el daño que hacen”, advirtió. “El último ataque fue terrible: entraron, le pusieron una tumbera en la cabeza a una clienta y nos metieron en el baño a todas. Se llevaron lo poco que había en la caja y nos dejaron una experiencia traumatizante”, recordó. La comerciante aseguró que ya vio pasar a varios comisarios por la seccional 2° y que nunca ninguno le dio una solución ni a ella ni a sus colegas.

“Esto se termina con sólo dos policías: uno en esta esquina y otro en la de Jujuy y Bolívar, porque todos los asaltantes de esta zona escapan hacia el sur. No tengo dudas de que este sector está liberado. ¿Dónde están hoy los efectivos que veíamos en las calles durante la cuarentena?”, planteó.

Finalmente, lamentó también la desigualdad ante este tipo de situaciones: “en esta cuadra viven los familiares de altos funcionarios; ellos tienen seguridad privada en los edificios y ni se enteran de lo que pasa con el resto de nosotros en el barrio. Lamentablemente no todos podemos pagar una guardia privada”.

Otro vecino, Horacio Albornoz, consideró que el ataque del miércoles fue muy violento y añadió que por lo general lo que se ve son arrebatos de oportunistas. “Ya está hasta naturalizada la inseguridad para nosotros, y eso está mal. Se volvieron rutinarios los ataques”, reflexionó.

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