03 Febrero 2020
EN 10 DÍAS. La imágen aérea muestra el nuevo hospital, construido en sólo 10 días en Wuhan, para tratar a los pacientes infectados por coronavirus. Reuters
La Comisión Nacional de Salud, el Ministerio de Asuntos Civiles y el Ministro de Seguridad Pública de China emitieron un estricto protocolo conjunto para el tratamiento de los cadáveres de personas que fallecieron por coronavirus, como parte de sus esfuerzos por controlar el brote.
En primer lugar, los muertos no podrán ser enterrados donde quieran sus familiares ni tener una despedida.
Las tradiciones funerarias, como una ceremonia final, están prohibidas y los cuerpos deberán ser desinfectados y colocados en una bolsa de cierre hermético por trabajadores médicos que no se podrán abrir después del sellado.
En segundo lugar, las funerarias deberán enviar personal y vehículos especiales para entregar los cuerpos de acuerdo con la ruta designada, y los cadáveres deben ser incinerados en crematorios designados, subrayó la directriz.
Según los últimos datos, el número de fallecidos se elevó hasta los 305 (46 más que el sábado), mientras que la cifra de infectados por esa enfermedad en territorio chino se situó en 14.380.
El primer caso se detectó en el centro de China a principios de diciembre. Ahora, casi dos meses después, es una emergencia global, con más de 14.500 casos confirmados en todo el mundo.
Medidas de prevención
Otra de las medidas tomadas por el riesgo de contagio, fue la de suspender los casamientos desde ayer. El ministerio de Asuntos Civiles, en un comunicado, puntualizó: “En caso de que hayan previsto el registro de matrimonios para el 2 de febrero, les recomendamos que lo cancelen”.
La fecha, considerada “de la suerte” por ser capicúa, había provocado miles de pedidos para celebrar matrimonios. De hecho, ciudades como Pekín y Shanghái habían resuelto, abrir sus registros civiles para que las parejas pudieran inscribir su casamiento pese a que era domingo.
Por otro lado, las medidas de control en estaciones de tren, aeropuertos y carreteras se multiplicaron ante la inmensa cantidad de gente que está volviendo a sus casas después de las vacaciones.
El Gobierno chino decidió la semana pasada retomar el período laboral el día de ayer aunque los centros escolares de todo el país permanecerán cerrados hasta nuevo aviso.
Por estas vacaciones, las autoridades estiman que los muertos aumentarán en los próximos días ya que mucha gente regresó de Wuhan antes de que la ciudad fuera puesta en cuarentena.
Cómo medida, las autoridades prohibieron a sus residentes abandonar sus hogares y solo una persona de cada casa podrá salir a comprar comida una vez cada dos días. (Télam)
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