Tucumán será hoy un infierno: cómo cuidar a los chicos en las piletas

Tucumán será hoy un infierno: cómo cuidar a los chicos en las piletas

La temperatura llegará a los 37°. Revisar el listado de habilitaciones del Siprosa, hablar con chicos y explicarles los peligros son algunos de los consejos de los profesionales consultados.

FELICES LOS NIÑOS. Para pasarla bien en la pileta, hay que tomar ciertos recaudos.  LA GACETA / FRANCO VERA FELICES LOS NIÑOS. Para pasarla bien en la pileta, hay que tomar ciertos recaudos. LA GACETA / FRANCO VERA

Los niños y el agua. Esa combinación que puede ser peligrosa, es blanco de control y prevención de organismos provinciales y municipales para que no ocurran tragedias. De todas formas, son los padres quienes deben estar más atentos que nadie. 

¿Qué es lo primero que deben chequear? ¿Cómo saber si está habilitada la pileta? ¿Qué le tengo que decir a mi hijo antes de entrar al agua? Esos interrogantes tienen respuesta de los profesionales consultados por LA GACETA, para despejar las dudas más comunes antes de pisar un natatorio.

En la provincia hay más de 200 piletas, entre piscinas de clubes, hoteles, gimnasios, centros educativos y polideportivos, que son auditadas por el Ministerio de Salud de Tucumán, a través de la Dirección General de Salud Ambiental, para que puedan prestar sus servicios de acuerdo a las normativas sanitarias vigentes. 

El Sistema Provincial de Salud (Siprosa) trabaja en la inspección, habilitación y control. Una de las exigencias es que los establecimientos deben exhibir cartelería y señalética oficial donde se publica visualmente, y a través de un código QR, información sobre la habilitación (pueden ser anuales o por temporada) y los nombres de los guardavidas autorizados. Eso es lo primero que hay que chequear. Un dato: Salud tiene un listado actualizado en su sitio web.

Entre los requisitos establecidos a través de la resolución ministerial (la número 33 de 2019) se incluye lo siguiente: deben contar con socorristas acuáticos, que tienen que haber realizado un curso de primeros auxilios en el 107; tener contratada una póliza de seguros y contar con un área protegida para que una ambulancia brinde asistencia durante una emergencia. 

Además, se exige que posean un informe que acredite las condiciones edilicias realizado por Defensa Civil o por un especialista certificado en Higiene y Seguridad; y que en el caso de los clubes, estos deben tener un médico que haga la revisación clínica.

Otros puntos que se controlan y que los padres pueden chequear es la instalación de las bandas o cercas perimetrales alrededor de la pileta, las indicaciones de las profundidades y la calidad del agua (no debe tener presencia de E.Coli) y contar con equipo de salvamento, detallaron desde el Siprosa.

La charla

Explicarles cómo es la pileta, dónde es más profunda, qué esquinas son peligrosas, que no deben correr alrededor de los natatorios, son cuestiones imprescindibles para que los más pequeños tomen conciencia de los riesgos por sí solos, aconsejó el profesor de Educación Física Maximiliano Blanco, que también es director deportivo la Neo Sport y Neocolonia de vacaciones las Lomitas.

“Es muy importante mientras recorren juntos la pileta, ir mostrándole los riesgos. Pero antes que nada, aprender a nadar es fundamental. En nuestra escuela lo pueden hacer desde los ocho meses. Es que el proceso en una edad temprana es mucho más rápido”, añadió el profesional tucumano. Además enumeró los siguientes consejos:

- Los padres deben asegurarse que la pileta tenga guardavidas (uno por cada 50 bañistas es lo que exige el Siprosa) y si éste tiene equipamiento, como handy o salvavidas.

- Chequear la superficie de la piletas, su tamaño y las profundidades. “En Tucumán hay muchas que tienen la parte más profunda a la misma altura que el ingreso de la pileta. Eso tiene un riesgo, que a veces llega al ahogamiento de los desprevenidos”, añadió el profesor. También deben revisar si la pileta tiene baranda (el Siprosa exige que mida 1.20 metro de largo) y cómo está el agua (limpia o turbia).

- Una buena opción es marcar una zona de control para que por allí se muevan los chicos y explicarles. También advertirles que no deben moverse de una pileta a otra, para evitar cortes o ahogamiento.

- Si sus hijos tienen un nivel principiante de natación, siempre llevarles bracitos, chalecos o flota flota con adaptador.

- El Siprosa tiene el listado de piletas habilitadas. Antes que nada, asistan a alguna de ellas y descarten las que no están incluidas.

- La alimentación previa al ejercicio físico en la pileta también es importante. Pueden ingresar al agua una hora después de haber ingerido alimentos, preferentemente. De esa manera evitan ahogamientos por vómitos.

Sentido Común

Por otra parte, cada municipio hace su propia campaña de concientización y de control. La Dirección de Defensa Civil de la Capital trabajó con estudiantes, docentes y personal de los clubes que cuentan con natatorios sobre las precauciones que deben tomar para evitar accidentes. Los consejos coinciden con las de los otros profesionales tucumanos. A ellos, agregaron que es peligroso permanecer en los natatorios al aire libre mientras llueve, especialmente durante tormentas eléctricas, porque el agua, por sus minerales y otros componentes, es conductora de electricidad.

Jorge Sepúlveda, titular de la mencionada Dirección, añadió que también inspeccionan el estado de los natatorios, para verificar que cumplan con normas de seguridad exigidas por el Siprosa, como contar con luces de emergencias, cartelería (ingreso, salida, profundidad de la pileta, entre otros) o que la piscina tenga barandas u otro sistema de agarre desde adentro (como sogas amarradas en argollas).

Denuncias o pedidos
La Dirección de Salud Ambiental está ubicada en calle Honduras 138. Teléfono: 4288011. Allí se puede consultar la habilitación de los natatorios, realizar denuncias o pedidos de inspecciones en caso de que observen la ausencia de guardavidas o no cumplan con las condiciones de higiene.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios