Emiliano Amor: “la pasamos muy bien”

Emiliano Amor: “la pasamos muy bien”

Uno de los puntos altos del “Santo”, asegura que el equipo disfruta cada partido.

EL PRIMER GRITO. Amor celebra su tanto ante Gimnasia de Jujuy. El central aportó solidez defensiva y también goles. la gaceta / foto hector peralta EL PRIMER GRITO. Amor celebra su tanto ante Gimnasia de Jujuy. El central aportó solidez defensiva y también goles. la gaceta / foto hector peralta
07 Diciembre 2019

Pese a que recién debutó justo en la mitad de camino de este San Martín ganador, fue quizás la pieza que terminó de solidificar a un equipo que picó en punta en la Primera Nacional, y no paró más.

Emiliano Amor arribó a La Ciudadela con el torneo comenzado, para suplir la baja por lesión de Juan Orellana. Le costó ponerse a punto y mucho más ganarse un lugar en el equipo titular. Recién pudo debutar en la fecha 7, justamente en el enorme triunfo del “Santo” contra Tigre en Victoria, debido al estado gripal que afectaba a Rodrigo Moreira, que era el titular en ese puesto.

A partir de allí, “Emi” no salió más; la sociedad con Abel Luciatti se transformó en uno de los puntos destacados del equipo y terminó el año brillando y hasta aportando goles importantes. “Con Abel nos sentimos muy cómodos, nos acoplamos muy bien y en pocos partidos. Pero no sólo es una virtud nuestra; acá todos aportan para que nosotros tengamos un buen nivel. Este San Martín es un equipo serio”, le explica el central a LG Deportiva, feliz por un semestre ideal. “Con mis compañeros la pasamos bien dentro de una cancha”, sentencia.

La frase hace ruido en Bolívar y Pellegrini y salta a la vista como un dato clave, revelador, que deja al descubierto el porqué del rendimiento casi sin fisuras que entregó en el primer tramo del torneo el equipo modelado y dirigido por la dupla integrada por Favio Orsi y Sergio Gómez.

Que los futbolistas la pasen bien jugando y disfruten de cada juego es un gran síntoma. “Es un grupo muy unido y eso no es un dato menor porque no todos los planteles son así. Yo me sorprendí muchísimo cuando llegué y vi la humildad que hay en todos los jugadores. Eso también hace que los cambios no resientan la estructura ni la forma de jugar que tiene San Martín”, asegura el ex Vélez y Aldosivi, chocho de la vida por esa frutilla en el postre que fue el contundente 3 a 0 sobre Gimnasia y Esgrima de Mendoza, ideado y ejecutado en pleno Parque General San Martín. “Nos merecíamos terminar el año de esta manera; por eso en el vestuario lo festejamos con todo. Durante el semestre hicimos un esfuerzo muy grande y estábamos esperando coronarlo de la mejor manera. Ese triunfo fue un cierre ideal”.

Los números avalan una campaña brillante. Sin ningún lugar a dudas, San Martín es el mejor equipo de la categoría; lo demostró en cada cancha en la que jugó. “Hay una jerarquía enorme y se nota a cada paso”, firma dejando en claro que cada integrante aportó en la materia. “Somos un equipo muy sólido y no se trata sólo del sector defensivo. Acá todos presionan, todos aprietan; desde los delanteros hasta ‘Nacho’ (Ignacio) Arce. Además, tenemos un volumen de juego muy bueno y, cuando no podemos llevarlo a cabo, aparece la garra. Presionamos, ‘mordemos’ y las individuales terminan inclinando la balanza a nuestro favor”, remata.

El “Santo” se fue de vacaciones con una sonrisa de oreja a oreja, pero nadie se relaja. “Hay que volver con todo”, pide Amor, el engranaje que faltaba.

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