Por Gustavo Rodríguez
29 Octubre 2019
CUIDADOSA TAREA. Los peritos del Ministerio Público Fiscal analizan la escena del crimen ocurrido ayer.
“Estamos mal. Cansados. Vemos, leemos y escuchamos de muertes todos los días. Hay que parar”, pidió Juana de García, vecina de avenida Francisco de Aguirre al 2.700 mientras los peritos trataban de encontrar indicios del homicidio de un joven. En menos de nueve días, cinco presuntos asaltantes perdieron la vida cuando cometían o después de haber cometido un delito. Y en lo que va del año se registraron al menos 25 hechos de justicia por mano propia.
“No busque más explicaciones, maestro. A la gente ya no le interesa nada. Llevar un mango a la casa es complicado y nadie aguanta que venga cualquiera, que no hace nada o, mejor dicho, que solo quiere drogarse, y pretenda quitárselo”, explico Federico Nieva de Villa Mariano Moreno, a metros donde un policía abatió a un joven que habría asaltado a un distribuidor.
Varios kilómetros separan a Las Talitas de Alderetes, pero los vecinos están unidos por el mismo espanto. “Acá ya no se puede vivir. A toda hora pasan los motochorros y te llevan lo que pueden. Hasta las bolsas de las compras les quitan a las viejitas. ¿Qué pueden hacer con una bolsa de pan? Daño. Y lo más grave es que son capaces de matarte por nada”, dijo Luciana de Medina, habitante de la ciudad donde se produjo el primero de los cinco hechos.
A los habitantes del barrio Alejandro Heredia, donde se registró el tercer caso, no les sorprende nada. Ni siquiera la muerte. “En este barrio siempre pasa lo mismo. Los más jóvenes roban a toda hora del día cualquier cosa para comprar droga. No justifico la reacción de la gente de salir a matar como sea porque el único que tiene derecho a quitarnos la vida es Dios. Pero también la entiendo. Los vecinos están cansados de vivir con miedo, de que nadie los escuche cuando piden por más seguridad. En la iglesia vivimos hablando de este tema”, explicó Josefa García.
Marcos Décima, un jubilado que vive desde hace más de 40 años en ese lugar, no dudó en ocultar su malestar por lo que está sucediendo en ese sector de la ciudad. “Acá los jóvenes son una verdadera plaga. Andan todo el día robando y lastimando gente. Los vecinos de bien, que nos deslomamos todo el día para llevar una buena vida, estamos cansados. Nadie nos escucha, nadie hace nada por frenar los robos. Entonces, no nos queda otra que defendernos”, opinó.
“Estamos en el horno, maestro. Acá en Aguas Corrientes hay mucha gente que vive del robo. Los laburantes no soportan eso porque ellos viven mejor. La sociedad está dividida por eso”, explicó Juan Carlos Lencina, vecino del barrio donde se produjo el último crimen.
Números
En lo que va del año, en nuestra provincia se registraron 113 homicidios, según los casos publicados por LA GACETA, mientras que el año pasado hubo 96. La Nación, en su informe anual de Estadísticas Criminales, ubicó a la provincia como la segunda más violenta del país, detrás de Santa Fe, al contabilizar 135 crímenes en 2018, un 14% más que en 2017, según sus números.
Las quejas de los tucumanos se reflejan en los números. El principal móvil de los homicidios en la provincia es la inseguridad. Según los casos publicados por LA GACETA, se produjeron 55 homicidios en situación de robo, lo que representa más del 45% del total y es el principal móvil de los crímenes. En 2018, en cambio, se habían registrado 33.
En los 10 meses de este año hubo 23 tucumanos que murieron en crímenes en ocasión de robo. También se registraron 25 casos de justicia por mano propia. Hasta el 23 de octubre de 2018, se contabilizaron 16 víctimas de crímenes producidos por delitos contra la propiedad y nueve víctimas que ultimaron a sus victimarios.
En lo que va del 2019 dos personas fallecieron por haber quedado en el medio de un tiroteo provocado por un hecho de inseguridad; en idéntico período de 2018 habían sido tres. En este año, cinco supuestos ladrones fueron abatidos en enfrentamientos con policías. Idéntico número se registró en 2018.
Son pocos (o casi ninguno) los tucumanos que están al tanto de las estadísticas, pero son conscientes lo que puede suceder. “Si esto no cambia rápido, la situación empeorará. No hay lugar al que uno vaya donde no se hable del cansancio por la inseguridad. Cada vez son más las personas que deciden armarse y eso se traducirá en más muertes”, concluyó Esteban Lazarte, del barrio Diza, donde se produjo el cuarto caso.
En 2018
- 96 homicidios se registraron hasta el 28 de octubre del año pasado.
- 33 crímenes fueron en situación de robo.
- 16 murieron en robos que sufrieron.
- 9 fueron casos de justicia por mano propia.
- 5 supuestos ladrones fueron abatidos por la policía.
- 3 murieron al quedar en medio de balaceras producidas en robos.
En 2019
- 113 homicidios se registraron hasta ayer en la provincia.
- 55 crímenes fueron en situación de robo.
- 23 murieron en robos que sufrieron.
- 25 fueron casos de justicia por mano propia.
- 5 supuestos ladrones fueron abatidos por la policía.
- 2 murieron al quedar en medio de balaceras producidas en robos.
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