San Martín, un líder con sólidos argumentos

San Martín, un líder con sólidos argumentos

El buen rendimiento que muestra el equipo no es casual. En este torneo, el "Santo" encontró la columna vertebral y cada pieza funciona a la perfección.

EL GOLEADOR. Pons es el arma letal del “Santo”. Es el máximo artillero de la Primera Nacional. EL GOLEADOR. Pons es el arma letal del “Santo”. Es el máximo artillero de la Primera Nacional.

¿Qué virtudes tiene San Martín para ser líder de la Primera Nacional? No son pocas. Y lo más venturoso para los hinchas “santos” es que las fortalezas del equipo se muestran crecientes a medida que avanza el torneo, incluso en el marco de actuaciones no del todo convincentes pero finalmente felices, como la del 1-0 de visita sobre Almagro, el jueves.

Un equipo con aspiraciones precisa de una columna vertebral sana. Y el equipo de Favio Orsi y Sergio Gómez la fue armando, con vértebras sobrevivientes de la experiencia en Superliga y otras recientes, llegados en los contingentes nuevos de refuerzos.

San Martín tiene arquero: Ignacio Arce está bien. A su habitual dominio del área y buen juego con los pies, en este campeonato parece haberle agregado un toque de prudencia, a fin de evitar que su estilo arriesgado genere efectos (bloopers) indeseados.

Y desde hace tres partidos, a partir de esa goleada fundacional ante Quilmes, el “Santo” encontró una zaga central sólida, capaz de bancar “paradas” difíciles. Emiliano Amor le ganó definitivamente el puesto a Rodrigo Moreira, quizá el “Talón de Aquiles” de la retaguardia en los primeros partidos. Y Abel Luciatti se complementa a la perfección con el exAldosivi, como si se conocieran futbolísticamente de toda la vida.

¿Cuánto ganó San Martín con la incorporación de Juan Mercier? Muchísimo. Quite, ubicuidad, equilibrio, primer pase: aun cuando no tiene su mejor tarde o noche, como pasó contra Almagro, el “Pichi” garantiza la cuota de experiencia necesaria, dentro y fuera de la cancha en todo equipo protagonista.

Y por el último, el nueve, un Luciano Pons encendido, que es un faro en la oscuridad –o en su soledad, como en José Ingenieros- incluso cuando no entra en contacto con la pelota o tiene la pólvora mojada. El exFlandria es, en definitiva, el máximo artillero del certamen.

¿Qué virtudes adicionales exhibió San Martín para derrotar al “Tricolor” y subirse en soledad a la cima de la Zona 2? Las voces de los protagonistas, en el pos partido, arrojaron ciertas pistas, algunas comprensiones nuevas.

“Lo bueno de este equipo es que sabe adaptarse, la Primera Nacional no es lo mismo que la Superliga, hay que adaptarse a distintas situaciones y controlar las variables del juego. Por momentos recuperaba Almagro y salía bastante rápido, tuvo un par de situaciones, entonces tuvimos que adaptar y pasar a un 4-4-2, cuando estábamos jugando un 4-3-3”, argumentó Gómez ante una consulta de LG Deportiva en la zona mixta del estadio Tres de Febrero.

“Está bueno que los chicos se puedan adaptar y lo tengan bastante aceitado, porque no todos los partidos son iguales”, agregó el entrenador sobre la adaptación a un nuevo esquema durante un mismo cotejo, algo que también habla bien de la flexibilidad táctica de la dupla conductora.

HOMBRE CLAVE. Mercier es el DT dentro del campo. Ordena a sus compañeros, marca y juega. HOMBRE CLAVE. Mercier es el DT dentro del campo. Ordena a sus compañeros, marca y juega.

En José Ingenieros, cuando lo necesitó, cuando la generación de fútbol no aparecía –o no era posible- el equipo supo ser menos ofensivo y buscar herir al rival por otras vías. El ingreso de los uruguayos Ignacio González Brazeiro y Luis Aguiar –a la postre autor del gol del triunfo con un zurdazo desde fuera del área-, apuntaló esa opción.

“Intentamos reemplazos que sirvieran para generar un cambio, darle al equipo una mayor frescura. Aguiar tiene buena pelota parada, remates de afuera, buenos pases gol, y Brazeiro es muy desequilibrante, entonces con la velocidad del ‘Turbo’ (Gonzalo Rodríguez) arriba, por ahí terminábamos de meter alguna contra para definir el partido. La victoria no se logró por esa vía, pero creo que entraron bien los dos”, señaló Gómez, certificando otra virtud compartida con su colega Orsi: no se trata de técnicos dogmáticos, sino pragmáticos.

Los jugadores también describen virtudes. Mauro Bellone, quien parece haberse adueñado del puesto que antes estaba en poder de Matías Fissore, destacó antes del regreso a Tucumán: “Vale ganar siempre y de cualquier manera, este equipo hace un esfuerzo enorme, te puede ganar de entrada, y te va a seguir corriendo hasta el final, no es un equipo que se relaje nunca y creo que esa es la mayor virtud que tenemos”.

Por su parte, Mercier –uno de los sustituidos en el complemento, por razones tácticas- ponderó: “Se trabajó muy bien el partido, Almagro fue un rival muy duro, que está peleando abajo, los partidos los tenemos que trabajar de esta manera. Vale mucho ganar de esta manera, porque nunca bajamos los brazos y no nos entregamos”.

Y una virtud añadida, que se va acuñando de a poco: San Martín ya lleva tres triunfos de visitante al hilo, un logro con antecedentes en temporadas lejanas. Consultado al respecto por LG Deportiva en José Ingenieros, Gómez afirmó: “Es algo que se valora mucho. Es una fortaleza jugar de local y tratar de sacar la mayor cantidad de puntos posibles, ahora eso nos está pasando de visitante”.

El próximo desafío, All Boys, también será a domicilio, el sábado 2 de noviembre. En ese nuevo aniversario del club se verá si sigue echando raíces otra virtud imprescindible para mantener el rumbo: la humildad.

“No hay que confundirse, hay que seguir por este camino, luchando cada partido como si fuese el último”, advirtió Bellone. “No hay que volverse loco, no hay que desenfocarse, así venimos y así vamos a seguir”, coincidió Gómez a unos metros, sumándose al mantra conjunto de la mesura y los pies sobre la tierra.

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